"El mejor regalo que hacemos a La Paz, como ciudad y como departamento, es la línea celeste que consolida al teleférico como una red de integración metropolitana", dijo Dockweiler a reporteros que visitaron la obra, donde centenares de obreros completaban los últimos detalles.
Dockweiler señaló que la línea celeste —las seis primeras se identifican también por colores- costó 81 millones de dólares y tiene una capacidad de transporte de 8.000 pasajeros por hora en una distancia de 2.600 metros.
Con la inauguración de otras tres líneas entre fin de este año y el primer trimestre de 2019, la red de transporte por cable de La Paz y El Alto tendrá una longitud total de 34 kilómetros y una capacidad combinada de transporte de al menos 250.000 pasajeros por día.
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La empresa de transporte por cable estudia futuras ampliaciones del servicio en La Paz y El Alto, además de posibles teleféricos en las ciudades sureñas de Sucre y Potosí, caracterizadas también por su escarpada topografía y con grandes diferencias de altura entre los barrios.
Hasta ahora, el grupo austríaco Doppelmayr Garaventa ha sido el contratista exclusivo del sistema.