"El presidente [Evo Morales] nos ha confirmado que el 14 de julio en horario nocturno entregará la línea celeste al servicio en La Paz y El Alto", dijo a reporteros el gerente de la empresa estatal Mi Teleférico, César Dockweiler.
Las primeras seis líneas, que entraron en funcionamiento progresivamente desde mayo de 2014, están identificadas también por colores y transportan actualmente unas 160.000 personas al día, según un reporte oficial.
Dockweiler destacó que la línea celeste unirá el principal paseo del centro de la capital, El Prado, con la llamada Curva de Holguín, acceso a la residencial Zona Sur donde se unirá a otras tres líneas ya en servicio.
"La celeste está proyectada para ser una de las más usadas, porque permitirá un acceso expedito al centro urbano evitando tanto atascos de tráfico como bloqueos y marchas" que ocurren con frecuencia en la capital política boliviana, dijo.
Dockweiler explicó que el teleférico, que sirve también a la ciudad vecina de El Alto, ha resultado "una solución exitosa para el transporte urbano en dos ciudades andinas con grandes diferencias de altitud entre sus barrios", entre 3.400 y 4.000 metros sobre el nivel del mar.
Concluida esta fase, la inversión el teleférico habrá sumado 740 millones de dólares y el sistema tendrá diez líneas, con una longitud total de 34 kilómetros y una capacidad combinada de transporte de al menos 250.000 pasajeros por día.
El grupo austríaco Doppelmayr Garaventa ha sido hasta ahora el contratista proveedor exclusivo del sistema.