"El Gobierno Federal, con apoyo de la Organización de las Naciones Unidas en Brasil [ONU], llevó este martes [el 15 de mayo] a otros 29 venezolanos de Boa Vista [Roraima] a Cuiabá [Mato Grosso]", informó el ministerio de la Casa Civil en un comunicado.
Cuiabá ya había recibido a 66 venezolanos en la primera fase de este proyecto, en abril, y como parte de ellos ya consiguió empleo y vivienda se abrieron nuevas plazas en el Centro Pastoral de Migrantes, posibilitando este nuevo viaje, informó el Gobierno.
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Con esta nueva remesa ya son 527 los venezolanos que se han adherido de forma voluntaria al programa de repartición por Brasil; fueron llevados a las ciudades de Sao Paulo (sureste), Manaos (norte) y Cuiabá (centro-oeste).
El Gobierno brasileño optó por la interiorización para dar respuesta a la crisis humanitaria que se vive en Roraima, donde tan sólo en la capital, Boa Vista, se estima que viven unos 40.000 venezolanos, la mayoría de los cuales duerme a la intemperie en condiciones muy precarias.
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La gobernadora llegó a pedir el cierre temporal de la frontera para poder valorar la capacidad real de acogida que tiene el estado y hacer un recuento detallado del número de inmigrantes, pero Temer descartó de forma tajante esta posibilidad.
