"Nuevamente pedimos públicamente la postergación de estas elecciones para el último trimestre del año, aunque estemos a pocos días del 20 de mayo, día señalado para las mismas", dice el comunicado de la Conferencia Episcopal venezolana.
Además, consideraron "ilegítima" la Asamblea Nacional Constituyente, y aseguraron que por ser este el ente convocante, dicho proceso electoral carece de validez.
La "crisis generalizada" que existe en Venezuela no ha sido "atendida ni por el Gobierno nacional ni por los gobiernos regionales", dice el texto.
Por ello, la campaña electoral que se inició el pasado 22 de abril y concluye el próximo 17 de mayo "no ha tenido emociones, ni proyecto país, ni un número considerable de seguidores", afirmaron los obispos.
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Los comicios para elegir nuevo presidente se realizarán en seis días, en medio de una fuerte presión internacional para que sean suspendidos.
La Unión Europea, Estados Unidos, Canadá, Colombia, Brasil, Chile, Argentina, Panamá y Perú advirtieron que desconocerán los resultados de este proceso.
Por su parte, el presidente Nicolás Maduro replicó que bajo ningún motivo se aplazarán los comicios, y que este país posee el sistema electoral más auditable y con mayores garantías del mundo.
