"Hemos establecido un acuerdo entre los mandos militares y policiales que redundarán en el aumento de la seguridad en nuestras fronteras", dijo el viceministro de Defensa ecuatoriano, Felipe Vega, tras el encuentro de la Comisión Binacional Fronteriza (Combifron) que tuvo lugar el 24 de marzo en la ciudad ecuatoriana de Tulcán (norte).
Vega destacó que las conversaciones entre ambos países sirvieron "para coordinar acciones que fortalecerán la seguridad de la ciudadanía que habita en la frontera común".
Los compromisos alcanzados se relacionan específicamente con compartir información, implementar centros coordinados de inteligencia entre las fuerzas militares y policiales, crear enlaces específicos para integrar las unidades de ambos lados, ejecutar ejercicios de capacitación en distintas áreas e incrementar la presencia de personal castrense y policial en puntos específicos.
La Comisión mantuvo este encuentro tras el último atentado registrado el pasado 20 de marzo que dejó tres soldados ecuatorianos muertos y 11 heridos en la localidad de Mataje (noroeste ecuatoriano) y cuyos responsables serían grupos residuales de la exguerrilla colombiana FARC vinculados al narcotráfico.
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Esa fue la quinta agresión registrada en la zona fronteriza en menos de dos meses; la primera ocurrió el 27 de enero en San Lorenzo; la segunda en Borbón, el 16 de marzo, y la tercera y cuarta se suscitaron en Alto Tambo y El Pan, el 18 de marzo, todas estas localidades fronterizas.
