"Hizo lo que tenía que hacer", señaló la funcionaria en una rueda de prensa.
Pese a que la Cámara del Crimen confirmó en una segunda instancia el procesamiento del policía por homicidio agravado, la ministra de Seguridad defendió que Chocobar "terminó con el peligro de una persona que estaba a punto de ser asesinada".
Bullrich reinvindicó el proceder del policía desde un complejo turístico en la localidad bonaerense de Chapadmalal, en la costa atlántica, donde se encuentra reunido parte del Gobierno con el presidente, Mauricio Macri, en un "retiro espiritual".
"Ésa es nuestra posición, la vamos a sostener", aseguró la ministra.
El Ejecutivo de Macri insiste de este modo en defender al policía, que fue recibido por el mandatario hace dos semanas, cuando el jefe de Estado reafirmó su orgullo por el proceder del agente.
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Chocobar disparó dos veces por la espalda a un joven de 18 años, Pablo Kukoc, que huía tras haber asestado diez cuchilladas a un turista en el barrio de La Boca, en la capital argentina.
Al ratificar su procesamiento por homicidio agravado, la Cámara del Crimen señaló en su fallo que los disparos de Chocobar contra Kukoc se realizaron "cuando ya había cesado la agresión concreta y sin un arma visible que los justificara de manera completa", lo que constituye "un exceso, aun cuando el propósito inicial responda a un interés profesional legítimo".
"En esto debemos ser absolutamente prudentes y claros: un policía tiene un deber de actuar y hacer cesar los efectos del delito, evitando que se ponga en riesgo su vida o la de terceros, pero no puede apartarse de los límites que la ley fija", destacó la resolución.
En su fallo, la Cámara del Crimen modificó el motivo de la acusación, que pasó de homicidio agravado por exceso de legítima defensa a la de homicidio agravado por la utilización de un arma de fuego en exceso en el cumplimiento de un deber.