"Están circulando informaciones de posibles ataques o intenciones non sanctas que podrían venir incluso del exterior", dijo Santos en una declaración televisada.
El mandatario no precisó sobre el riesgo de una posible interferencia externa en las elecciones, pero señaló que durante el plebiscito del 12 de octubre de 2016, por el que los colombianos debían votar si aprobaban o no el acuerdo de paz con la guerrilla de las FARC, la Registraduría fue objeto "de múltiples ataques cibernéticos a la página web, [aunque] por fortuna todos fueron neutralizados con éxito".
En ese sentido, ordenó activar un puesto de mando unificado para "enfrentar cualquier amenaza de seguridad digital" en las legislativas de marzo y las presidenciales de mayo.
Dicho puesto, añadió, "va a contar con la asesoría de expertos en seguridad informática y digital".
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El próximo 27 de mayo los colombianos deberán escoger en las urnas al sucesor de Santos, quien deberá dejar el poder el 7 de agosto tras dos periodos de Gobierno y estar impedido por la Constitución a buscar un nuevo mandato.
