"Nos gustaría brindarles noticias más precisas respecto a este punto… Al momento no se ha podido, con todo el esfuerzo desplegado que se viene realizando en la zona de operaciones… no ha sido posible detectar fehacientemente al submarino San Juan, es caso fáctico, lo tenemos que encontrar", dijo el militar en conferencia de prensa en Buenos Aires.
Balbi subrayó que "la zona es grande, el lugar es muy hostil y es muy difícil la búsqueda", por lo cual la Armada opta por difundir solo "hechos fácticos" y esperar a tener datos confirmados.
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El portavoz también destacó que "desde el fin de semana hubo un gabinete de crisis" organizando el operativo de rescate.
Al mismo tiempo la Armada argentina no tiene indicios de que el submarino ARA San Juan haya sido víctima de un ataque, aunque "no se descarta nada", afirmó Enrique Balbi.
"No tenemos ningún indicio en todos estos días que demuestre eso, aunque no se descarta nada", afirmó el militar ante la pregunta de un periodista sobre si la explosión detectada en la zona en que se comunicó por última vez la nave la semana pasada pudo haberse debido a un "ataque" bélico.
Consultado sobre si efectivamente la explosión estaría relacionada con el San Juan, Balbi señaló: "Inferimos, sin descartar nada, que podría ser el submarino".
El 23 de noviembre, la Armada argentina anunció haber recibido información de que, el mismo día, en la misma zona y cerca del mismo horario en que el San Juan reportó su última posición, se registró un "evento anómalo singular, corto, violento y no nuclear consistente con una explosión".
La información fue aportada por la Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (OTPCE), gracias al registro de su red internacional de estaciones de detección.
El dato coincidía con un indicio aportado por EEUU el 22 de noviembre, de que se detectó una "anomalía hidroacústica" en el lugar donde el ARA San Juan se comunicó por última vez.
