"Todos los que luchamos hoy por el socialismo, la justicia social, somos hijos de la Revolución de Octubre, de Vladimir Ilich Lenin (1870-1924)", dijo Ubieta.
Para Ubieta, los revolucionarios latinoamericanos heredaron la vía abierta en Rusia en octubre de 1917 (7 de noviembre en el calendario gregoriano).
"Hemos transitado por esa ruta a nuestra manera, con nuestras ideas y nuestra creatividad, pero tenemos esa deuda histórica", comentó.
Para salvar a la humanidad de su autodestrucción hoy es necesario luchar contra el imperialismo "depredador", abundó Ubieta.
Tras el derrocamiento del régimen zarista en Rusia se produjo "una especie de onda expansiva" que dejó una marcada influencia en América latina y el Caribe, dijo.
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Lenin, el líder de esa revolución, abrió el camino de una manera inesperada, "en un gran país y multinacional, pero de la periferia", y no como habían previsto Carlos Marx y Federico Engels en las naciones desarrolladas.
Lenin describió ese fenómeno en su libro 'El imperialismo, fase superior del capitalismo', en el cual explicó que la primera guerra con ese carácter ocurrió precisamente con la intervención en 1898 de la Armada estadounidense en Cuba, cuando ya el dominio español agonizaba.
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Martí, por su parte, vivió en Estados Unidos desde 1880 hasta 1895, vio y estudió la génesis de ese sistema y alertó en sus escritos sobre ese peligro para Cuba, el Caribe y América Latina, comentó Ubieta.
El Gobierno de Cuba culmina este martes con una gala política y cultural en el teatro Karl Marx un programa de actividades por el centenario de la Revolución Rusa.
Las actividades requirieron por su envergadura medidas para reorganizar el tránsito en la capital, a cargo de la Comisión Provincial de Seguridad Vial.
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Distintas formas de celebración tienen lugar desde hace varias semanas en todas las provincias del país y en instituciones como la Biblioteca Nacional, el Instituto de Historia de Cuba, el de Amistad con los Pueblos y el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias.
