"La huelga es un acto precipitado que descalifica el proceso de negociación y perjudica todo el esfuerzo realizado durante este año para retomar la calidad y los resultados financieros de la empresa", subrayó Correos en un comunicado.
La empresa asegura que hay afecciones en el área de distribución de pedidos en 1.600 agencias de Correos, pero asegura que el 93% del total del efectivo está trabajando.
Los trabajadores que impulsan la huelga critican el cierre de agencias por todo el país, las presiones para sumarse al plan de bajas voluntarias, el corte de inversiones y las amenazas de privatización, entre otros aspectos.