"Al adoptar la Carta Democrática Interamericana en 2001, los países de América Latina y el Caribe asumimos el compromiso de que la democracia es la forma de Gobierno que debe prevalecer en nuestra región", dijo el jefe de la diplomacia mexicana en un discurso difundido por su oficina.
El señalamiento al país caribeño fue hecho luego de admitir que la democracia mexicana no es perfecta; por lo tanto, en la elecciones generales para la Presidencia y renovar el Congreso en julio de 2018, "nuestro país se abrirá al escrutinio internacional y se atenderán los problemas que existen en la materia para corregirlos".
La observación internacional es "un poderoso instrumento de cambio, de perfeccionamiento y de defensa de los valores democráticos", dijo el canciller.
"Sin duda nuestra democracia electoral tiene múltiples defectos que no podemos ignorar y se tienen que atender puntualmente y de manera frontal: el uso de dinero ilícito en las campañas, los actos de promoción ilegales, inequidades y actos anticipados de campaña", admitió Videgaray.
Observación internacional y sobornos en campañas
Venezuela "es un caso extremo, lamentable y doloroso, y lo dice México no porque nuestra democracia sea perfecta, sino porque hay la disposición de mejorarla", continuó el canciller.
La Constituyente venezolana "se ha convertido en un poder supranacional por encima de los poderes democráticamente constituidos, es un gravísimo retroceso en el proceso de democratización en la región", insistió el secretario de Relaciones Exteriores.
Videgaray reafirmó la apertura al escrutinio de observadores internacionales, porque México lo que "necesita es mejorar los escenarios de la contienda política y por esa apertura es que se puede hablar del caso Venezuela".
La conferencia fue convocada por la Fundación Kofi Annan, a la cual asisten legisladores del Parlamento Latinoamericano y Caribeño, autoridades electorales regionales.
"Esta conferencia debe reunir a todos los que, como nosotros, queremos profundizar la democracia y las elecciones con integridad en toda la región y más allá", dijo el líder internacional.
El reconocimiento de las ilegalidades en México por parte del alto funcionario federal fue hecho luego de que el 13 y 14 de agosto recién pasados fueron publicados documentos judiciales de los tribunales de Brasil, que involucrarían a la campaña electoral del presidente Enrique Peña Nieto.
Según los documentos, la campaña presidencial del mandatario mexicano —de la cual Videgaray fue jefe en 2012— habría recibido al menos 4 millones de dólares en sobornos de la constructora brasilera Odebrecht, a través de uno de los altos miembros de su campaña, Emilio Lozoya Austin.
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Lozoya Austin fue Coordinador de Vinculación Internacional de la campaña electoral por la presidencia mexicana, quien habría aceptado otros sobornos durante su gestión, después de ser nombrado director general de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) de diciembre de 2012 a febrero de 2016.
Por su parte, el vocero de la presidencia Eduardo Sánchez, dijo que vincular los sobornos de Odebrecht "a la campaña del presidente Enrique Peña Nieto me parece no solamente absurdo, sino falso, y desde luego claramente de mala fe".
"En su oportunidad las autoridades competentes fiscalizaron los gastos de campaña del entonces candidato Enrique Peña Nieto y resolvieron que los recursos que se obtuvieron y se ejercieron durante la campaña se llevaron a cabo conforme a la ley", respondió su portavoz.
