"Hasta octubre se inaugurarán 352 viviendas, señor presidente", dijo la secretaria técnica del Plan Toda una Vida, Irina Cabezas, en el arranque de las construcciones en la ciudad de Portoviejo, provincia de Manabí (oeste), la más afectada por el terremoto de abril de 2016.
Cabezas explicó que la intención es avanzar "lo más rápido posible" con las obras que servirán para "construir hogares y no solamente edificar paredes".
Está previsto que este proyecto reactive además al sector inmobiliario, pues empleará a más de 135.000 personas durante los próximos cuatro años.
Así lo señaló Moreno al mencionar que con la misión Casa Para Todos "dinamizaremos la economía al utilizar productos y mano de obra del Ecuador" y que además "miles de personas" dejarán de pagar arriendo.
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De las 325.000 viviendas que comprende el plan, 191.000 se entregarán gratuitamente a las familias que vivan en condición de extrema pobreza, y por las 134.000 restantes los beneficiarios deberán pagar cuotas de entre 20 y 60 dólares mensuales.
Una de las beneficiarias, Raquel Otera, agradeció a Moreno en el acto de inauguración de las obras por ayudar a "levantar los sueños de quienes hace un año atrás teníamos un futuro incierto".
La zona donde se edificarán las primeras casas está entre de las más afectadas por el sismo de magnitud 7,8 de abril del año pasado.
"No tiene idea de la emoción que sentimos, en nombre ellos, de mi familia, muchísimas gracias", dijo la ciudadana al presidente.
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La misión Casa Para Todos es parte del Plan Toda una Vida, instaurado por el mandatario al inicio de su administración con el fin de extender la asistencia social desde el nacimiento hasta la muerte de cada persona.
