"En casos de blanqueo, lo que importa es la realidad de los hechos en función de las pruebas y no su mera apariencia", respondió el magistrado en su decisión, publicada el 18 de julio.
Los abogados de Lula acusaron al juez Moro de "omisión" porque según ellos obvió el detalle de que el inmueble, que originalmente pertenecía al banco Bancoop, pasó a manos de OAS cuando esta entidad financiera quebró.
Asimismo, señalan que nunca perteneció a Lula y recuerdan que los investigadores nunca encontraron un título de propiedad que le inculpara.
Lea también: "Lula no interfirió en lucha contra blanqueo de dinero"
Moro rebatió este argumento diciendo que entonces también debió haber absuelto a Eduardo Cunha, expresidente de la Cámara de Diputados.
"Él también afirmaba como justificante que no era titular de las cuentas en el exterior que habían recibido depósitos de ventajas indebidas, sino solamente "usufructuario en vida", recordó el magistrado.
Lula se convirtió en el primer expresidente de la historia de Brasil condenado por un delito de corrupción, pero la sentencia no es firme y podrá ser recurrida en un juzgado de segunda instancia.
Más aquí: "Lula fue condenado sin pruebas"
Los abogados y simpatizantes de Lula confían en que entonces el exmandatario y líder del Partido de los Trabajadores sea absuelto y pueda así presentarse como principal candidato de la izquierda en las elecciones presidenciales de 2018.