"Votar me tomó 20 segundos, había 10 mesas en mi centro de votación, y aunque había mucha gente realmente la cola avanzó rápido, por eso me siento alegre, complacido, espero que esto permita que mi voz sea escuchada en el mundo, y que sea una ramificación de la voz de los venezolanos", dijo este domingo a Sputnik, Ronald Dulcey, un estudiante universitario de 22 años.
El proceso también conocido como plebiscito no vinculante que se realiza en Venezuela entre las 7:00 y 16:00 (11:00 y 22:00 GMT), se lleva a cabo al margen de la autoridad electoral, Consejo Nacional Electoral (CNE).
Por su parte, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, señaló la tarde del sábado que se trataba de una consulta interna de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), y pidió a los seguidores de ese sector realizar su proceso de manera pacífica e indicó que si deseaban que tuviese validez, debían pedir la autorización del CNE.
"Si quieren hacerla legal deben convocar al CNE pero si quieren hacer una consulta interna que la hagan, pero en paz", expresó el mandatario durante un acto en el Panteón Nacional en Caracas transmitido por el canal estatal, Venezolana de Televisión.
Por su parte, los ciudadanos que asistieron a votar en el municipio Libertador, al oeste de Caracas consultados por Sputnik, se mostraron contrarios a la postura del jefe de Estado, y sostuvieron que la legalidad se la da con la participación de la población.
"Ellos pueden decir que no es legal, pero para nosotros lo es, después de mucho tiempo queriendo votar, lo estamos haciendo, este pueblo es pacífico y lo único que queríamos hacer desde abril de 2016 era votar, expresar que no queremos a este Gobierno y ese derecho se nos había negado", manifestó a esta agencia Iraida Tovar de 51 años, quien se identificó como trabajadora del hogar.
Tovar hizo referencia al referéndum convocado la oposición y el cual tras la recolección de firmar para activarlo fue anulado por tribunales civiles en octubre, por considerar que hubo una irregularidad en el proceso de recolección de firmas.
Luis Zambrano de 58 años afirmó que participa en esta consulta porque desea "que el Gobierno salga por la vía electoral, no por un golpe de Estado".
"Lo que debemos decir es que este Gobierno debe irse, porque estamos muy mal, hace un año mi papá murió por falta de medicamentos, y no quiero que más venezolanos pasen por eso, yo soy de Margarita (estado Nueva Esparta, norte) y tuve que venirme a Caracas porque la isla está quebrada, no hay trabajo, jamás había visto eso antes", añadió.
Para este proceso la oposición activó 2.030 centros denominados como "puntos soberanos", los cuales poseen entre 10 y 15 mesas de votación, además, acreditaron a más de 47.272 miembros de mesa y más de 80.000 funcionarios, informó la MUD el sábado.
El participante al ingresar al "punto soberano" recibe una explicación de cómo votar, posteriormente se acerca a la mesa entrega su documento de identidad con sus datos que son completados en un libro, y posteriormente firma y coloca su huella, recibe el tarjetón, manifiesta su opinión y lo deposita en una caja.
Posteriormente recibe un comprobante en el que ratifica su rechazo a la Constituyente, su intención de que los poderes públicos sean renovados y la realización de elecciones "libres y transparentes, para la instauración de un Gobierno Nacional".
La consulta opositora se realiza luego de tres meses de continuas manifestaciones contra el Gobierno que han dejado 95 muertos y 1.400 heridos, entre los que se encuentran opositores, oficialistas, funcionarios de seguridad y transeúntes.
Lea más: La oposición en Venezuela cierra calles para impulsar el plebiscito contra la Constituyente
