"Llamo a los que amamos a esta patria, a quienes la sentimos, a quienes queremos calidad de vida, a quienes quieren que sus familias vuelvan a unirse y quienes quieren que sus hijos regresen al país con oportunidades a defender pacíficamente y sin violencia lo que por derecho nos corresponde", señaló Ortega.
La funcionaria venezolana, que previamente se había pronunciado ante la Asamblea Nacional (parlamento unicameral), aseguró que no se intimidará ni se entregará "sin luchar por los derechos de los venezolanos".
"Ahora más que nunca debemos unirnos, sumar esfuerzos para restituir el estado de derecho, la independencia de los poderes públicos, calidad de vida y la paz que merecemos, lo que está en juego es la libertad y el futuro, definitivamente no podemos perder a Venezuela", añadió.
Durante su intervención en el Parlamento, donde se ratificó al vicefiscal Rafael González Arias a pesar de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) declaró la nulidad de esta designación, Ortega reconoció la legitimidad del Parlamento.
Sobre la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, pesa una sentencia de desacato al TSJ desde mediados de 2016, que declara como nulas e írritas todas sus decisiones.
Por ello, ante estas acciones de la fiscal general y el Parlamento, el presidente Nicolás Maduro, ha alertado acerca de confabulaciones para perpetrar un golpe de Estado.
Venezuela vive desde hace tres meses una ola de protestas opositoras que han dejado 85 muertos y más 1.300 heridos, además de cuantiosas pérdidas en ataques y saqueos a comercios e instituciones del Estado.
