"Los niveles de algunas quebradas y ríos podrían ocasionar incrementos súbitos, en especial para los ríos de montaña de la cordillera occidental", dice el informe elaborado por el Ideam para varios departamentos del centro y norte colombiano.
Asimismo añade que existe una amenaza moderada de que se produzcan "deslizamientos de tierra detonados por lluvias en zonas de ladera y alta pendiente".
Según el instituto colombiano, los departamentos Antioquia (centro norte) y Arauca (este) se encuentran bajo alerta roja por riesgos de deslaves y crecientes, mientras los departamentos de Cauca y Putumayo, al suroeste, Chocó (norte) y el central Cundinamarca, donde se sitúa la capital, presentan una alerta naranja.
Las fuertes lluvias y granizadas en Bogotá motivaron el sábado la suspensión de los vuelos en el principal aeropuerto capitalino, El Dorado, lo que perjudica la movilización de los turistas para esta Semana Santa.
Las autoridades también están analizando el desarrollo del tránsito terrestre por miedo a posibles deslaves, informó el periódico local El Tiempo.
La Policía de Tránsito de Colombia emitió una serie de recomendaciones al momento de movilizarse por las rutas nacionales donde llama a chequear el pronóstico del tiempo y el estado de las rutas nacionales en una línea telefónica administrada por la fuerza estatal.
El 1 de abril una avalancha de lodo provocó casi 300 muertos en el municipio de Mocoa, al sudoeste del país.
La emergencia que golpeó a Mocoa en su parte urbana (habitada por unas 36.000 personas) fue ocasionada por las fuertes lluvias que cayeron en la región, las cuales provocaron los desbordamientos de los ríos Mocoa, Mulato y Sancoyaco.
