Tras un momento de dudas, Brasil dio el visto bueno a la idea del corredor, que tiene previsto unir los puertos de Ilo, al sur del Perú, y el de Santos, al este de Brasil, atravesando territorio boliviano.
"Que Brasil haya dado su aval para incorporarse a este megaproyecto de integración le da más consistencia a esta iniciativa que hasta hace poco estaba significando un esfuerzo tripartito entre Perú, Paraguay y Bolivia", señaló a Sputnik el gerente general del Instituto Boliviano de Comercio Exterior, Gary Rodríguez.
El 21 y 22 de marzo, el Gobierno de Bolivia realizó en La Paz la reunión técnica entre los países y organismos multilaterales interesados en impulsar el tren bioceánico, que demandará una inversión de más de 10.000 millones de dólares.
Los representantes de los gobiernos asistentes al encuentro, entre ellos Perú, Paraguay, Brasil, Uruguay, Alemania y Suiza, acordaron crear un mecanismo de coordinación para hacer un seguimiento al desarrollo del proyecto.
"Desde la perspectiva nacional es importante contar con puertos que sean de gran porte, pensados en función no sólo de un país, sino de una globalización que es una realidad, y con un intercambio que va a ir creciendo a partir de lo que pueda ser una mayor presencia de Asia sobre Latinoamérica y viceversa", señaló Rodríguez al destacar la importancia de la iniciativa para el sector privado.
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De acuerdo con datos del Ministerio de Obras Públicas, de concretarse la construcción del corredor ferroviario bioceánico de unos 3.700 kilómetros de longitud, éste tendría una capacidad para transportar alrededor de 10 millones de toneladas de productos en 2021.
Proyecto multinacional
Los gobiernos de Bolivia y Alemania firmaron el 22 de este mes un memorándum de entendimiento para impulsar el corredor ferroviario bioceánico.
"Esta idea de unir el (océano) Atlántico con el Pacífico a través de ferrocarriles es como es como si fuera un canal de Panamá; esto servirá a todos los países lindantes", dijo el viceministro de Transporte de Alemania, Rainer Bomba, tras la firma del acuerdo, en la que participó también el ministro de Obras Públicas de Bolivia, Milton Claros.
Bomba añadió que el emprendimiento del tren bioceánico no solo despertó el interés de América Latina sino "de todo el mundo".
"Es el proyecto del siglo", aseguró el funcionario alemán quien además destacó la presencia en Bolivia de representantes de 40 empresas de su país que expresaron interés en la obra.
"Se habla de más de 10.000 millones de dólares (respecto al) costo de inversión, pero el hecho de que hayan países como Alemania que están interesados en el financiamiento, o China, en la lógica que tiene de convertirse en la primera potencia económica mundial, hablan de la trascendencia del proyecto", apuntó Gary Rodríguez.
Paraguay apuesta por el corredor bioceánico
El Gobierno paraguayo está interesado en articular la opción del corredor ferroviario que ayudaría a potenciar la integración regional y ofrecer nuevas oportunidades, según declaró hace una semana a Sputnik el viceministro de Obras Públicas y Comunicaciones de Paraguay, Agustín Encina.
Encina explicó que su Gobierno busca potenciar la localidad de Carmelo Peralta (norte) en su territorio garantizando la navegabilidad del río Paraguay hasta la confluencia con el río Paraná, lo que sería "un gran incentivo para el comercio entre ambos países".
"Creo que ésta es una alternativa muy positiva para Bolivia y para nosotros también", remarcó el viceministro.
Encina aseguró que el proyecto fluvial que plantea Paraguay se complementa con el emprendimiento boliviano que busca conectar el Atlántico con el Pacífico.
Este mega proyecto será un factor importante para la integración regional y traerá numerosos beneficios a los países involucrados.
Se proyecta que la obra tendrá una inversión aproximada de entre 10.000 y 14.000 millones de dólares y su construcción tomará entre cinco y siete años.
