El huracán Matthew, que fue el más potente en el Atlántico desde el año 2007, afectó la costa este de Cuba y obligó a las autoridades del país a evacuar a más de un millón de personas.
"En el marco de la participación en los esfuerzos internacionales por paliar las consecuencias del paso del huracán, el Gobierno ruso acordó financiar proyectos del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en la República de Cuba", señala la nota.
Se precisa que son proyectos en los ámbitos de construcción, abastecimiento de agua y sanidad.
"La decisión de prestar ayuda a Cuba se tomó en el marco de la política de Rusia en materia de cooperación al desarrollo y confiamos en que este apoyo contribuya al fortalecimiento de los nexos ruso-cubanos", remarcó la Cancillería rusa en su comunicado.