El colegio La Condamine se pronunció el viernes al respecto señalando que se sienten "profundamente conmovidos y consternados por la situación que atraviesa la familia denunciante y particularmente el niño", por lo que esperan "que la justicia determine responsabilidad y falle conforme a derecho".
Después de realizar estudios psicológicos al menor, se reveló que había sido víctima de una agresión sexual.
Los detalles proporcionados por el menor indicaban que había sido abusado por su profesor de natación, quien de acuerdo con el testimonio, le obligaba a practicar sexo oral y lo amenazaba con hacer daño a sus padres si contaba algo de lo sucedido.
La familia del menor presentó las respectivas denuncias el 4 de noviembre de 2014, tras lo cual el colegio también se vio obligado a presentar la queja en la Dirección Nacional de la Policía especializa en niños, niñas y adolescentes (Dinapen).
Una primera resolución judicial sobreseyó al acusado, pero en una segunda instancia, el Tribunal de Pichincha lo sentenció a 22 años de prisión por violación, dictamen que fue apelado por el docente y cuya audiencia debía llevarse a cabo el jueves, algo que no ocurrió debido a la ausencia de uno de los tres jueces.
Al momento, el maestro cuenta con medidas sustitutivas, es decir, permanece en libertad pero debe presentarse una vez por semana ante la justicia y no puede salir del país.
El malestar ciudadano incrementó en Ecuador al conocer que el defensor del implicado es Caupolicán Ochoa, el abogado personal de Correa.
"Si mi presencia podría afectar de algún modo el buen desarrollo de la justicia, yo no tengo ningún problema en solicitar a la familia que pidió mis servicios que prescindan de los mismos para evitar comentarios perversos o que se quiera dar a un asunto eminentemente legal y profesional un giro político", dijo el jurista, según recoge el diario La Hora.
A esto se suma que la esposa del mandatario, Anne Malherbe, trabaja también como docente en La Condamine y los tres hijos de Correa han cursado sus estudios allí.
Protestas
En las afueras de la Corte se reunieron decenas de personas, especialmente mujeres vestidas de blanco, pidiendo justicia para el pequeño, cuyo nombre se guarda en reserva debido a la sensibilidad de caso, y exigiendo prisión para el acusado.
"Justicia para principito" o "no más violencia sexual; con los niños no", fueron algunas de las leyendas que se leían en carteles a la salida de los tribunales.
A Vaca sí le preocupa que existan influencias políticas por la estrecha relación que existe entre Ochoa y el Gobierno.
El Ejecutivo no se ha pronunciado al respecto, aunque la ciudadanía reclama que el propio mandatario exprese su postura.