El discurso de Trump marcó un día "fatídico para la historia de nuestro país", dijo el congresista mexicano, tras los anuncios oficiales de construir un muro, deportar millones de migrantes y renegociar acuerdos comerciales.
"Hemos escuchado el discurso de juramento de Donald Trump, no fue un discurso que celebra la democracia, fue un discurso que festejó su victoria, sin ofrecer ninguna reconciliación", lamentó Barbosa en una conferencia de prensa.
El discurso de Trump "puede sonar muy populista (…) pero la composición de su Gobierno es una composición oligárquica, es una composición de ricos, es un Gabinete de ricos", lanzó el dirigente de la tercera fuerza legislativa.
Según Barbosa, la expectativa de que Trump atenuara su retórica agresiva contra México no ocurrió.
"No se moderó, fue un discurso ultranacionalista, ese será el tenor de su Administración y así hay que asumirlo, sin hacernos ilusiones de que va a cambiar", advirtió.
En su futura reunión de la próxima semana en Washington con el equipo de Trump, los secretarios mexicanos de Relaciones Exteriores y de Economía, "deberían estar acompañados por una representación del Senado de la República para que se construya una política de Estado, no de Gobierno ni de partido", planteó Barbosa.
Alianza del Congreso y el Gobierno
La representación de México en la primera reunión con el primer círculo de la Casa Blanca la próxima semana, "o siguiente reunión si podemos pensar que hubo otras antes de manera oculta —dijo Barbosa aludiendo a la polémica visita de Trump en plena campaña— debe tener claro que la sociedad mexicana no quiere un Gobierno que decline a cada una de las pretensiones y deseos del nuevo presidente de EEUU".
La posición del presidente Enrique Peña Nieto debe ser "enérgica ante la probable construcción del muro fronterizo, ante la eventual deportación masiva de migrantes, ante la salida o la terminación del TLC (tratado de libre comercio) y otros tratados bilaterales y multilaterales en materia de comercio internacional".
Barbosa recordó conflictos de México con otras naciones o con EEUU en varios momentos de su historia: en 1836, cuando México perdió Texas, en 1846, cuando ocurrió una invasión estadounidense y la entrega por el entonces presidente Santa Anna de 2 millones de kilómetros cuadrados.
Mencionó además el conflicto con EEUU en 1914, "con su presencia militar en el puerto de Veracruz y ante la expropiación petrolera de 1938".
"Yo creo que este es otro momento de coyuntura profunda de México frente a nuestro país fronterizo, la economía más grande del mundo", advirtió.
Barbosa relató una reunión con el canciller Luis Videgaray, antes de su viaje a EEUU.
"Le planteé al canciller la participación del Senado en la construcción de esta política de Estado", ante la cual Luis Videgaray fue receptivo, dijo.
Barbosa afirmó que la concentración de decisiones del Ejecutivo no funcionó.
"Hoy tiene que actuar ante esta crisis, con esa apertura, la apertura institucional, la apertura de construir posiciones de Estado y no de Gobierno", puntualizó.