La inserción social e integración de las familias refugiadas que lleguen al país se realiza en el marco del Programa Siria, que fue implementado en 2014 por el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) y renovado por el actual Ejecutivo de Mauricio Macri.
"Es fundamental producir un acompañamiento y pensar en estar muy cerca; una vez que llegan, facilitarles aprendizaje de idioma, el entendimiento de nuestra cultura, de cómo funcionamos", sostuvo Malcorra.
El equipo que atenderá a los refugiados que huyen de la guerra en Siria está conformado por una Comisión de Cascos Blancos de la cancillería argentina y por representantes de los Ministerios de Desarrollo Social, y de Justicia y Derechos Humanos.
Los participantes del proyecto prepararán el viaje de las familias hacia Argentina, se encargarán de la atención inmediata de los recién llegados para facilitar su proceso de acogida y después avanzarán en su integración social.
El grupo tiene por objetivo brindar asistencia humanitaria y facilitar el acceso de los refugiados a sus derechos sociales con la colaboración de instituciones públicas y privadas.
"La ejecución de este proyecto de acompañamiento y asistencia para la inserción social contempla la implementación de jornadas de capacitación para profesionales y voluntarios, el relevamiento de información y el abordaje social de la asistencia psicosocial, así como el seguimiento, monitoreo y evaluación durante todo el proceso de acogida", aseguró la cancillería en un comunicado.
El esquema de visado humanitario conocido como Programa Siria depende de la Dirección Nacional de Migraciones y su vigencia ha sido prorrogada hasta tanto continúe el conflicto en ese país de Medio Oriente.
