El cuerpo de su hermano fue hallado cuatro días después con signos de tortura, y luego otro de sus hermanos corrió la misma suerte en Norte de Santander (norte), y aunque Gloria asegura que desconoce a los autores, ha aprendido a perdonar y votará por el 'Sí' en el plebiscito.
"Es una oportunidad democrática que se abre en favor de las víctimas y gracias a lo cual podemos cicatrizar las heridas y construir una Colombia con justicia social", considera.
Un total de 141 comités se inscribieron en el Consejo Nacional Electoral (CNE) para promover el 'Sí', entre los que también se cuenta Jóvenes Víctimas del Conflicto, que lidera Alejandra Mahecha, desplazada por la violencia.
"Mis padres debieron cargar conmigo desde muy pequeña y huir del Huila (suroeste) hacia Bogotá por amenazas de las FARC, las cuales extorsionaron a mi papá hasta que él no pudo pagarles más y entonces atentaron contra su vida", dijo a esta agencia Alejandra, de 21 años, quien agrega que hoy en día la familia ya ha perdonado y se sumará al 'Sí' para comenzar un nuevo país en paz.
"El voto a favor del 'Sí' es algo que tiene muy motivados a los campesinos; he hablado con varios compañeros desmovilizados y creemos que esa es la mejor opción, respaldar esa iniciativa para que cambie el futuro del país", dice Miguel.
Asegura que quienes se inclinan por el 'No' son "aquellas personas que no han vivido la guerra y que viven en las grandes ciudades".
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Puede ser cierto. Aunque una reciente encuesta de la firma Cifras & Conceptos revela que el 62% de los colombianos votará por el 'Sí', mientras que un 38% se decanta por el 'No', un porcentaje que ha crecido en los últimos días, lo que evidencia que pese a los mecanismos adoptados en La Habana para amnistiar a los victimarios, el perdón es una convicción íntima que por ahora divide al país.
