Es que son una pareja de transgéneros —personas que se identifican con un género opuesto al de sus características fisiológicas de nacimiento—. La familia ganó fama en las redes sociales y se volvió mundialmente conocida tras Fernando quedar embarazado de Diane.
"Era un deseo de ambos y al no existir nada que nos lo impidiera, tanto biológica como legalmente, decidimos hacerlo", reveló Rodríguez a El Cinco.
Pese a que se identifican con el género opuesto, ninguno de los dos se ha sometido a la cirugía de reasignación de sexo y, por esa razón, pudieron concebir a su hijo sin necesidad de intervención médica.
El 20 de mayo de 2016 nació el bebé, a quien la pareja de activistas LGBT todavía no ha dado nombre, pero a quien llaman cariñosamente Caraote.
Para muchos, la historia de Diane y Fernando es un símbolo de la diversidad sexual y de la lucha contra los prejuicios y por los derechos de las minorías sexuales.