Para México "es prioritario cerrar el paso a los traficantes de armas y a aquellos que hacen transferencias irresponsables y que sólo buscan un beneficio económico inmediato", dijo la jefa de la diplomacia mexicana en l conferencia que se desarrolla hasta el 26 de agosto.
La diplomática saludó los esfuerzos que el presidente Barack Obama ha llevado a cabo "para fortalecer los controles sobre la posesión y venta de armas" en el país con el cual México comparte más de 3.000 km de frontera terrestre.
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Las autoridades de EEUU estiman que en su país existen más de 56.000 armerías, y tan sólo en los cuatro estados que colindan con México hay más de 9.000 establecimientos legales de venta, lamentó Ruiz.
Además, en la zona fronteriza existen más de 23.000 licencias para la venta de armas en ferias, por internet e incluso en los principales supermercados de EEUU, "donde es tan fácil adquirir armas como lo es adquirir un litro de leche o una caja de cereal", dijo la canciller mexicana.
Por esa razón, hizo un llamado al Congreso de EEUU para que "instaure nuevamente la restricción a la venta de armas de alto poder en ese país, que tanto daño han hecho en ambos lados de la frontera".
Armas libres en EEUU
Desde el 2005 las armas de asalto se venden libremente en EEUU, tras la suspensión del embargo para su venta para uso privado.
Esa autorización permite a las organizaciones criminales transnacionales dotarse de "un enorme poder de fuego que afecta tanto a México como a EEUU y lo hace un reto binacional", prosiguió Ruiz.
México ha reiterado un llamado que hizo el 14 de julio recién pasado ante la Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), al Congreso de EEUU "para que sostenga un debate franco, constructivo y con una visión regional sobre la prohibición de la venta de armas de asalto".
Entre diciembre de 2012 y julio de 2016 México ha decomisado 40.000 armas, 23.000 de las cuales son equipos de alto calibre, 4.000 granadas y 5,6 millones de municiones, agregó.
México se ha sumado así a "una de las demandas más delicadas y urgentes que enfrenta la comunidad internacional", para frenar la violencia que causa la muerte de 740.000 personas al año a cusa de armas convencionales.
Un reto global
Actualmente, el valor del comercio mundial de armas representa alrededor de 100.000 millones de dólares anuales, el doble del total de la ayuda oficial al desarrollo que otorgan los miembros de las economías más desarrolladas que integran la OCDE.
Ningún Estado por sí solo puede hacer frente al comercio ilegal de armas, considera el Estado mexicano, "ya que no es un problema exclusivo de un país o región, y mucho menos de un Gobierno".
Este tratado global "establece por primera vez en la historia criterios para el control de transferencias legales de armas convencionales entre Estados, a fin de evitar que éstas se desvíen al mercado ilícito y caigan en manos equivocadas", dijo la canciller.
El comercio ilegal de armas es más lucrativas es comparable con el tráfico de drogas y la trata de personas, y los expertos estiman que existen 875 millones de armas pequeñas y ligeras, que cada año se producen 8 millones de armas nuevas, y 12.000 millones de municiones, dos municiones por cada habitante en el planeta.
México fue sede de la Primera Conferencia de los Estrados Partes, en agosto del año pasado, en Cancún.
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El tratado suma a 87 Estados Parte de los cuales solo dos, México y Guatemala, provienen de América Latina y El Caribe.
