"Hebe de Bonafini recibió al juez Martínez De Giorgi y se negó a declarar", anunciaron fuentes judiciales a Sputnik.
El abogado particular de Bonafini, Juan Manuel Morente, había solicitado que la titular de Madres pudiera comparecer ante el juez en la sede de la organización que dirige, ubicada en un barrio céntrico de la capital argentina.
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Al difundirse la resolución del juez, centenares de manifestantes se presentaron en la sede de la organización para custodiar e impedir la detención de la presidenta de la entidad, de 87 años, que acudió a la tradicional ronda que realizan cada jueves las Madres en la histórica Plaza de Mayo, frente a la sede de Gobierno, pese a la medida dictada en su contra.
La imputación concreta contra Bonafini es por la firma de dos acuerdos con el Ministerio de Trabajo entre 2008 y 2010 que realizó la fundación Sueños Compartidos, administrada por Madres de Plaza de Mayo.
El juez Martínez di Giorgi ya ha cumplido con el trámite de llamar a declarar a Bonafini, de modo que ahora solo debe decidir si hay mérito suficiente para procesar a la presidenta de Madres de Plaza de Mayo, o bien declara la falta de mérito.
En la causa están imputadas un total de 43 personas, entre los que destaca el exministro de Planificación del Gobierno anterior, Julio De Vido, que el lunes se presentó en los tribunales federales y se declaró inocente de las acusaciones.
