El paro coincidirá con la celebración en el estadio Mané Garrincha del partido de fútbol masculino entre Iraq y Dinamarca, dentro de los Juegos Olímpicos de Río 2016.
La huelga no debería tener un gran impacto en la seguridad en las calles, ya que las tareas de patrulla corresponden a la policía militar; sin embargo, la comisaría que se encuentra dentro del estadio probablemente permanecerá cerrada.
En su última comparecencia pública para hablar de esta posible propuesta, la secretaria de Seguridad Pública, Marcia de Alencar, dijo que no temía un boicot y que la huelga de estos agentes sería considerada "crimen militar".
Los policías civiles se están movilizando porque quieren el mismo aumento salarial que sus colegas de la Policía Federal, que a partir de 2017 verán su sueldo aumentado un 21 por ciento.