Con un peso de 90 kilogramos y dos metros de longitud, el FT-200FH podrá volar durante 18 horas ininterrumpidas gracias a su motor de gasolina de alto rendimiento, unas prestaciones mejoradas con el sistema "fletteners" que permite la eliminación del rotor de cola, una verdadera ventaja a la hora de operar en misiones de transporte rápido de pequeñas mercancías, revisión del tendido eléctrico o en operaciones militares de precisión.
En este sentido, su gran estabilidad y autonomía, unos 70 kilómetros de radio de acción, hacen de esta Aeronave Remotamente Pilotada (ARP) ideal para misiones de control fronterizo en las densas selvas de la Amazonía brasileña un terreno en el que los drones convencionales encuentran mayores dificultades operativas.
El proyecto FT-200FH fue desarrollado entre la Central Eléctrica de Santa Catarina (CELESC), el Instituto de Estudios y Gestión de Energía (INERGE) así como empresas de Alemania y el Reino Unido, todo ello con una inversión en desarrollo de 9,3 millones de reales (2,47 millones de dólares) aunque la compañía espera poder facturar entre 20 y 30 millones de reales (entre 5,3 y 7,95 millones dólares) en los próximos dos años.
