El presidente del PT de Brasil alerta del chantaje mediático

El presidente del Partido de los Trabajadores de Brasil (PT), Rui Falcao, denunció en un artículo de opinión el "chantaje" que los periódicos de los grandes medios de comunicación estarían efectuando sobre la presidenta Dilma Rousseff a raíz de la rebaja de la nota crediticia por Standard & Poor's.

"Dilma hace lo que la oposición político-mediática desea o el esquema de poder, que la derecha organiza, hará mucho más de lo que ya ha venido haciendo para destituir a la presidenta", alertó Falcao, quien interpretó la rebaja de S&P como "una señal" para que la derecha exija, a través de sus diarios, amplios recortes en los programas sociales del Gobierno y en el salario mínimo, y con ello, imponer su agenda neoliberal desde la oposición.

En concreto, Falcao habría hecho referencia a la editorial de Folha de Sao Paulo del pasado 13 de septiembre en la que bajo el título "La última oportunidad" se exigía a Rousseff la aplicación de una serie de medidas neoliberales en el campo económico que supondrían un fuerte recorte en los gastos de salud, educación y, especialmente, los programas sociales que sacaron a 22 millones de personas de la pobreza.

Para Falcao, las medidas de recortes del gasto con el objetivo de conseguir un superávit del 0,7 por ciento del PIB en 2016 habrían sido impuestas por los mercados y la derecha al Gobierno de Rousseff y exigió "más impuestos y menos recortes" como forma de salir de la crisis fiscal y recordó que "no se debe sacrificar a quienes más necesitan las políticas públicas, ni tampoco renunciar a las conquistas de los trabajadores y del pueblo".

En la misma línea que Falcao, el expresidente del Partido Comunista de Brasil (PCdoB), Renato Rebelo, señaló que Brasil se encuentra "frente un ataque contra el Estado democrático de derecho y del mandato constitucional de la presidenta de la República", para insistir en que la derecha del país no habría aceptado su cuarta derrota consecutiva en 2014 y que por ello se encontraría "con las garras hacia fuera" y aprovechando "la crisis mundial estructural del capitalismo".