Aldo Lema, vicepresidente de la Cámara de Comercio Uruguay-Chile, dijo a Sputnik Nóvosti que China está invirtiendo en América Latina, "más allá de las expectativas sobre variaciones de precios".
"Se incorporan también consideraciones estratégicas de posicionamiento en la región, hasta incluso de influencia política. Lo que le va a pasar al dólar o al precio de los activos en la región, son cosas que importan menos", analizó el economista.
De acuerdo a un informe de la consultora argentina Econométrica, los swaps (intercambios) de monedas entre Argentina y China —que alcanzarán los 11.000 millones de dólares, según acordaron ambos países a mediados de 2014— otorgaron a empresas chinas adjudicaciones directas para la construcción de dos represas hidroeléctricas y otras obras públicas, "sin pasar un proceso de licitación internacional que asegure los estándares mínimos de calidad, precios, plazos de entrega y transparencia".
El dinero que ingresó a las arcas del Estado argentino permitió despejar "las expectativas de devaluación, pese a todo el contexto internacional".
El economista uruguayo señaló a Sputnik Nóvosti que el ingreso del país asiático en América Latina se produce gracias a su "enorme cantidad de recursos" y a una política "ofensiva".
Para Elías, el objetivo es que América Latina sea el proveedor de materias primas del país asiático, para que este luego pueda venderle a la región, productos industrializados con valor agregado medio y alto.
"Lo que está instrumentando China en América Latina es la vieja relación centro-periferia respecto a nuestros países", concluyó.