En concreto, la PM estimó el número en cinco personas por metro cuadrado, una cifra a todas luces excesiva que tuvo como resultado un cálculo en torno al millón de participantes en la protesta que contrasta fuertemente con los 210.000 manifestantes establecidos por el cálculo del estudio Datafolha, dirigido por el diario Folha de Sao Paulo.
En total, la Policía Militar de Brasil calculó en torno a dos millones el número total de manifestantes en todo el país, una cifra que destaca por el desequilibrio de las manifestaciones en Sao Paulo (con un millón de personas) con otras ciudades como Río de Janeiro con apenas 25.000 manifestantes o las ciudades del sur del país, Curitiba y Porto Alegre (las más contrarias a Dilma Rousseff) con apenas 100.000 manifestantes.