El Gobierno de Enrique Peña expresó su "profunda consternación y molestia" por la muerte del mexicano Ernesto Javier Canepa Díaz ocurrido el viernes 27 de febrero, por disparos de oficiales del Departamento de Policía de Santa Ana, California.
La condena de México se acentúa debido que esta nueva muerte de un mexicano por disparos de policías de EEUU "se suma a los recientes fallecimientos de los mexicanos Antonio Zambrano Montes (de 31 años, el 20 de febrero) y Rubén García Villalpando (35 años, el 10 de febrero), en Pasco, Washington y Euless, Texas, respectivamente, que involucran presumiblemente el uso excesivo de la fuerza", indica un comunicado oficial.
Police officers fired 17 times shot dead in Washington Antonio #Zambrano-Montes investigators 37-years-old @CNN pic.twitter.com/Nzhx8gIWb3
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Estos incidentes –dice la cancillería mexicana- "no pueden verse de manera aislada, el gobierno de México ha hecho un llamado al Departamento de Justicia de Estados Unidos para que mediante su división de Derechos Civiles, acompañe la investigación de estos tres casos", indica el texto diplomático, el más severo de los tres emitidos por cada caso.
New: Mexican government "deeply condemns" @GrapevinePolice shooting death of Ruben Garcia Villalpando @NBCDFW pic.twitter.com/AxNfuFQvR5
— Ben Russell (@BenRussellNBC5) February 26, 2015
México exige a las autoridades estadounidenses "asegurar que se conduzcan con transparencia y en su caso, se deslinde la debida responsabilidad penal o civil a que haya lugar".
El Gobierno mexicano se sumó así al llamado de diversas organizaciones de la sociedad civil que señalan la urgente necesidad de avanzar en la revisión de las políticas y prácticas de uso de la fuerza por parte de las autoridades estadounidenses.
México entró en contacto personal con el Jefe de Policía de Santa Ana y el Fiscal del Condado de Orange y les dirigió misivas "expresando su profunda preocupación por los hechos ocurridos", pidiendo una investigación exhaustiva y medidas que prevengan la repetición de incidentes similares.
El Gobierno de México ha solicitado al Grupo de Consulta sobre Derechos Civiles de los Mexicanos en Estados Unidos (MCRAG, por sus siglas en inglés), explorar opciones legales que permitan responder a este incidente y a otros similares.
México ha planteado estrategias para "sensibilizar a la opinión pública sobre la necesidad de que se revisen y mejoren las políticas y prácticas de uso de la fuerza" de las corporaciones policiacas estadounidenses.
A la consternación de sumar el tercer caso de un mexicano fallecido por el uso excesivo de la fuerza en menos de un mes, se añade la profunda preocupación por el efecto de fractura de confianza entre la comunidad hispana y las fuerzas policiacas que pudiera derivar de estos hechos.
"En estos tres lamentables casos, el Gobierno de México hará uso de todos los recursos disponibles para velar por el interés de las familias de las víctimas, con el fin de que tengan pleno acceso a la justicia de conformidad con las leyes aplicables", puntualiza el texto.
El canciller Antonio Meade, quien acompaña al presidente Enrique Peña en una visita de estados al Reino Unido, dijo el martes de la semana pasada al Senado que en el último año ha habido 76 casos de uso excesivo de la fuerza contra migrantes mexicanos en EEUU, y uno de ellos resultó en la muerte de un mexicano, de manera que el saldo de muertes ahora se eleva a tres.