"México lideró en 1967 uno de los esfuerzos más nobles e importantes para liberar a América Latina y el Caribe de la amenaza nuclear", dijo el mandatario mexicano en un discurso ante el cuerpo diplomático acreditado en México y la región.
Peña evocó "la intensa y larga negociación del Tratado de Tlatelolco, para lograr los consensos necesarios para hacer realidad este acuerdo exigió un verdadero cambio de mentalidad entre los líderes de aquella época".
Relató el mandatario que al suscribir el Tratado para la Proscripción de las Armas Nucleares en la América Latina y el Caribe, "los países de la región rechazamos la falsa creencia de que las armas nucleares eran la mejor medida de protección".
México y Latinoamérica han mostrado que "para garantizar la paz y la seguridad internacionales, elegimos el diálogo y la cooperación, en lugar de los misiles".
"La historia nos ha dado la razón, pero aún debemos luchar para proscribir las armas nucleares", puntualizó el mandatario.