"El Consejo de Seguridad subraya la necesidad de reaccionar con urgencia ante el brote de ébola, porque esta enfermedad puede propagarse rápidamente, incluyendo a los países vecinos, lo que puede provocar consecuencias humanitarias graves", dice la declaración aprobada este 2 de agosto por los miembros del Consejo.
El Consejo de Seguridad "toma nota de que la Organización Mundial de la Salud [OMS] declaró el brote de ébola en la RDC emergencia de salud pública de importancia internacional" a mediados de julio pasado.
El Consejo subrayó la importancia de coordinar las acciones de los países de la región con la RDC para solucionar la situación.
El brote actual de ébola en la RDC comenzó en julio de 2018 y, según los últimos datos oficiales del Ministerio de Salud del país africano, ha causado unos 1.700 muertos.
Este 2 de agosto en la ciudad de Goma, centro administrativo de la provincia de Kivu del Norte, limítrofe con Ruanda y Uganda, fue detectado el cuarto caso de contagio del virus del Ébola en menos de un mes.
El virus del Ébola provoca una enfermedad grave que a menudo conduce a un desenlace letal, con una tasa de mortalidad que llega al 50%.
La enfermedad, que se contrae mediante el contacto directo con órganos, sangre u otros líquidos corporales de las personas infectadas y con materiales contaminados, va acompañada de fiebre, debilidad y dolores musculares, vómitos, diarrea, erupciones cutáneas, disfunción renal y hepática y, en algunos casos, hemorragias internas y externas.
