El 20 de enero se informó de ocho cascos azules chadianos muertos en un ataque contra una base de las fuerzas de la Misión de la ONU en Malí, perpetrado por un grupo de yihadistas vinculados con Al Qaeda (organización terrorista proscrita en Rusia y otros países).
La nota señala que los cascos azules "repelieron con firmeza" el ataque en su contra.
Guterres condenó la ofensiva contra los cascos azules y expresó sus condolencias al Gobierno de Chad y los familiares de los fallecidos y deseó pronta recuperación a los heridos.
Además, llamó a las autoridades de Malí a encontrar a los autores del ataque y llevarlos ante la justicia.
La crisis en Malí se desencadenó tras el derrocamiento en 2011 del régimen de Muamar Gadafi en Libia cuando el territorio maliense fue invadido por numerosos refugiados tuaregs.
Además: Varios muertos por un ataque de combatientes en el noreste de Malí
Tras ocupar las zonas del norte de Mali, los tuaregs proclamaron el Estado independiente de Azawad, pero más tarde fueron expulsados de estos territorios por grupos armados.
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó en 2013 enviar al país la Misión Multidimensional Integrada de Estabilización en Malí.
