"La decisión de Marruecos de hacer retroceder unos cientos de metros a sus tropas cerca de Guerguerat es una cortina de humo que no oculta el desprecio de Rabat por la legalidad internacional ni su obstinación y rechazo por casi tres décadas de la aplicación de las resoluciones del Consejo de Seguridad y de la Asamblea General sobre el Sahara Occidental", expresó el Frente Polisario en un comunicado difundido el 26 de febrero.
Del mismo modo, asegura "compartir la preocupación sobre la actual situación en Guerguerat" y respalda la petición de Guterres de respeto para los términos del alto al fuego suscrito entre el Sáhara Occidental y Rabat en 1991.
El Frente Polisario recordó que situaciones de tensión como la vivida los últimos meses, en la que las tropas de ambas partes se congregaron en puntos separados por apenas cien metros de distancia, no son un caso aislado.
"La existencia de dicho tráfico hoy en día, es una violación del estatuto del territorio y el alto el fuego", prosigue el comunicado.
En su declaración, el Frente Polisario señaló que "la situación actual y todo lo que se deriva de ella es responsabilidad exclusiva de Marruecos".