Las restricciones comerciales de EEUU contra China son para mantener su dominio regional
Las restricciones comerciales de EEUU contra China son para mantener su dominio regional
Sputnik Mundo
Las recientes restricciones de la Administración Biden para impedir avances de China en diferentes ámbitos comerciales, como el tecnológico, no están dictadas... 26.08.2023, Sputnik Mundo
Washington ha exacerbado recientemente las tensiones con Pekín tanto a través de las restricciones comerciales como de una mayor implicación estadounidense en la región Asia-Pacífico. A principios de este mes, Biden firmó una orden ejecutiva que restringe a las empresas estadounidenses la inversión en capacidades y tecnologías chinas de inteligencia artificial (IA), incluidos los semiconductores y la computación cuántica.La cumbre trilateral celebrada la semana pasada en Camp David entre los líderes de Estados Unidos, Japón y Corea del Sur levantó sospechas sobre el intento de establecer un bloque militar y político alineado con Occidente en la región. Que el Gobierno de Biden afirmara que la alineación con OTAN no era una de las principales prioridades de las conversaciones no sirvió para calmar las preocupación de China. El gigante asiático reaccionó advirtiendo que los bloques excluyentes en Asia-Pacífico se encontrarán con la vigilancia y la oposición de las naciones de la región.En sus palabras, China se ha beneficiado del libre flujo de capital extranjero, occidental y estadounidense desde 1978, cuando se abrió comercialmente y especialmente desde que se unió a la Organización Mundial del Comercio (OMC) en 2001.Ahora, añade Garver, Washington quiere restringir el flujo de tecnología y capital occidentales para evitar que contribuyan al desarrollo de las capacidades militares chinas.Sin embargo, asegura, la industria estadounidense está dividida al respecto, ya que China es un mercado enorme y creciente para las grandes empresas estadounidenses, al que son muy reacias a renunciar.Resistencia y contestaciónEn las últimas semanas, los consejeros delegados de las principales empresas estadounidenses de microchips han instado a la Administración Biden a abstenerse de imponer medidas drásticas a China. Algunos incluso advirtieron de que las nuevas restricciones podrían perjudicar el liderazgo del país norteamericano en la industria de semiconductores.China ha tomado represalias contra las restricciones de EEUU con nuevos controles a la exportación de minerales como el galio, esencial para la fabricación de microchips y considerado un mineral crítico por el Departamento de Energía estadounidense.El historiador y analista estadounidense Jeremy Kuzmarov considera las últimas restricciones de Biden como una apuesta arriesgada que podría resultar contraproducente.En su opinión, Estados Unidos espera establecer un formidable bloque antichino y acelerar la productividad económica en Taiwán y en las industrias nacionales, pero esto podría suponer importantes reacciones negativas por intentar aislar a China.Washington y muchos aliados también corren peligro si China decide actuar contra Taiwán, donde una sola empresa (Taiwan Semiconductor Manufacturing Company) fabrica más del 50% de los semiconductores del mundo.
Las recientes restricciones de la Administración Biden para impedir avances de China en diferentes ámbitos comerciales, como el tecnológico, no están dictadas por sus intereses económicos, sino que se derivan de un esfuerzo por mantener el dominio de EEUU en el Pacífico occidental, dijeron expertos a Sputnik.
Washington ha exacerbado recientemente las tensiones con Pekín tanto a través de las restricciones comerciales como de una mayor implicación estadounidense en la región Asia-Pacífico. A principios de este mes, Biden firmó una orden ejecutiva que restringe a las empresas estadounidenses la inversión en capacidades y tecnologías chinas de inteligencia artificial (IA), incluidos los semiconductores y la computación cuántica.
La cumbre trilateral celebrada la semana pasada en Camp David entre los líderes de Estados Unidos, Japón y Corea del Sur levantó sospechas sobre el intento de establecer un bloque militar y político alineado con Occidente en la región. Que el Gobierno de Biden afirmara que la alineación con OTAN no era una de las principales prioridades de las conversaciones no sirvió para calmar las preocupación de China.
El gigante asiático reaccionó advirtiendo que los bloques excluyentes en Asia-Pacífico se encontrarán con la vigilancia y la oposición de las naciones de la región.
"Esta creciente alineación entre Rusia y China para expulsar a EEUU de la posición dominante en el Pacífico occidental y sustituirlo por el liderazgo chino subyace a esta oleada de nuevas restricciones contra China para restringir la tecnología militar, estratégica relevante, especialmente en áreas de informática y telecomunicaciones", dijo a Sputnik John Garver,profesor de Asuntos Internacionales de Georgia Tech.
En sus palabras, China se ha beneficiado del libre flujo de capital extranjero, occidental y estadounidense desde 1978, cuando se abrió comercialmente y especialmente desde que se unió a la Organización Mundial del Comercio (OMC) en 2001.
Ahora, añade Garver, Washington quiere restringir el flujo de tecnología y capital occidentales para evitar que contribuyan al desarrollo de las capacidades militares chinas.
Sin embargo, asegura, la industria estadounidense está dividida al respecto, ya que China es un mercado enorme y creciente para las grandes empresas estadounidenses, al que son muy reacias a renunciar.
En las últimas semanas, los consejeros delegados de las principales empresas estadounidenses de microchips han instado a la Administración Biden a abstenerse de imponer medidas drásticas a China. Algunos incluso advirtieron de que las nuevas restricciones podrían perjudicar el liderazgo del país norteamericano en la industria de semiconductores.
China ha tomado represalias contra las restricciones de EEUU con nuevos controles a la exportación de minerales como el galio, esencial para la fabricación de microchips y considerado un mineral crítico por el Departamento de Energía estadounidense.
El historiador y analista estadounidense Jeremy Kuzmarov considera las últimas restricciones de Biden como una apuesta arriesgada que podría resultar contraproducente.
"Creo que la medida de Biden es significativa y muy arriesgada porque China se está convirtiendo en una potencia económica y tecnológica y, al desvincularse de ella, EEUU puede quedarse rezagado, cosa que parece que ya está sucediendo", advirtió Kuzmarov.
En su opinión, Estados Unidos espera establecer un formidable bloque antichino y acelerar la productividad económica en Taiwán y en las industrias nacionales, pero esto podría suponer importantes reacciones negativas por intentar aislar a China.
Washington y muchos aliados también corren peligro si China decide actuar contra Taiwán, donde una sola empresa (Taiwan Semiconductor Manufacturing Company) fabrica más del 50% de los semiconductores del mundo.
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