El crimen organizado se apodera de las cadenas de suministros básicos de Guerrero

El estado de Guerrero, ubicado en el sur de México con salida al Océano Pacífico, es uno de los territorios más complejos del país por sus factores históricos, políticos, sociales, económicos, de posición estratégica y de presencia del crimen organizado.

Escenario de la guerrilla popular de Lucio Cabañas contra el sistema político del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la década de 1970, y de la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa perpetrada en Iguala en 2014, Guerrero es rico en un humedad y calor, por lo que es un espacio propicio para el cultivo de plantas como la amapola y la mariguana.

Un reportaje publicado en Milenio describió que el crimen organizado en la entidad ha penetrado en la cadena de insumos básicos, como jitomate, aguacate, limón y carne, mediante injerencia en la producción, distribución y venta.

Comerciantes afectados acusan que bandas criminales identificadas como Los Tlacos y Los Ardillos disputan el mercado de esos productos, incluido el pollo, además de intervenir la ruta que va de Chilpancingo, la capital de Guerrero, a Petaquillas.

Estas fuerzas ilegales violentan y ejercen el miedo contra los pobladores a manera de mecanismo de presión, de acuerdo con acusaciones de comerciantes de Chilpancingo luego de que sufrieron tres días de escasez y el asesinato de ocho personas.

Comerciantes del pollo aseguraron que el crimen organizado financia granjas del producto, controla a repartidores y también gestiona la venta al menudeo.

Una testimoniante aseveró que la escasez de esta carne atrajo la atención de las autoridades para asumir la dimensión del problema.

Estos grupos del crimen organizado amenazaron durante al menos un año a los vendedores para que cambien de proveedores, una posición ante la que no habían cedido.

El 6 de junio un repartidor de pollo de 35 años, quien trabajaba en el mercado Baltazar Leyva, fue asesinado, y el 9 de junio se registró otro ataque homicida en el estacionamiento del mismo punto de venta.

El sábado 11, además, fueron asesinadas seis personas en Petaquillas, localidad aledaña a Chilpancingo y ubicada a unos 9 kilómetros al sur. Las víctimas estaban involucradas en el comercio del pollo.