PAN presenta una denuncia contra el hijo de AMLO por corrupción y tráfico de influencias

José Ramón López Beltrán, hijo del presidente Andrés Manuel López Obrador, debe ser investigado por posibles actos de corrupción y tráfico de influencias, aseveró este 3 de febrero el Partido Acción Nacional (PAN).

La dirigencia nacional del blanquiazul, acompañada de legisladores federales y locales, presentó una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR) en contra del hijo del mandatario, luego de que un reportaje de la plataforma Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad señalara un posible conflicto de interés entre López Beltrán, una propiedad en Houston, Texas, y contratos otorgados por Petróleos Mexicanos (Pemex).

"Pedimos que se investigue el origen de los recursos de las lujosas casonas de Houston que fueron exhibidas a través de los medios de comunicación y, además, que se investigue todo lo relacionado a los contratos de las empresas proveedoras de Pemex", expresó el líder nacional del PAN, Marko Cortés.

"Exigimos, y por eso hoy presentamos esta denuncia de hechos, una investigación puntual, exhaustiva y con resultados creíbles a la sociedad, no queremos nuevamente un manto protector ni de impunidad, tal como ocurrió en la supuesta investigación de la tragedia de la línea 12 del metro, que provocó la muerte de 26 personas", apuntó el blanquiazul.

Cortés acusó al Gobierno federal de difundir un falso discurso de austeridad y honestidad, mientras se generan estos conflictos de intereses entre una empresa contratada por Pemex y el hijo del presidente.

López Obrador, aseveró el dirigente panista, protege a sus hijos, hermanos, parientes y consentidos.

Como ejemplo, Cortés recordó el caso de la sanción ratificada por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) contra el ayuntamiento de Texcoco, Estado de México, por un esquema de desvíos salariales operado durante la gestión de Delfina Gómez, hoy titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

Además, en redes sociales el PAN se refirió a la propiedad en Houston señalada como "Mansión del bienestar", en ironía sobre los programas sociales que impulsa la actual administración federal.