La Policía española desmantela una red que traía a mujeres de China para prostituirlas | Video

BILBAO (ESPAÑA) (Sputnik) — La Policía Nacional española desarticuló una red que explotaba sexualmente a mujeres de nacionalidad china y que favorecía la inmigración irregular de ciudadanos de ese país a España.

Las mujeres eran obligadas a prostituirse "en casas de citas, en condiciones de semiesclavitud, insalubridad y con disponibilidad 24 horas", informó en rueda de prensa el comisario de la Policía Nacional, Carlos Río-Miranda Iglesias, jefe de la Brigada Central de Trata de Seres Humanos.

🚩Desmantelada una red criminal dedicada a la trata de seres humanos y explotación sexual de mujeres chinas

Tenía 2 ramas delictivas, diferenciadas y coordinadas entre sí, en #Zaragoza y #Bilbao

🔹63 detenidos en Bilbao (50), Zaragoza (12) y #Madrid (1)
🔹5 mujeres liberadas pic.twitter.com/CszmHCqieh

— Policía Nacional (@policia) January 18, 2022

La operación se realizó en las ciudades españolas de Zaragoza, Bilbao y Madrid y hay 63 detenidos: 60 de nacionalidad china, dos pakistaníes y un español, según informó el cuerpo policial, que añadió que se incautaron 115.000 euros en metálico y sustancias estupefacientes.

La organización tenía dos ramas. La que operaba en Zaragoza era la dedicada a la explotación sexual de las ciudadanas chinas, que eran obligadas además a vender estupefacientes a los clientes antes o después de los encuentros sexuales.

Estas mujeres eran captadas en su país con la promesa de una vida mejor en España, según informó la Policía; sin embargo, al llegar al territorio español eran recluidas en las casas de citas con fuerte vigilancia, sin documentación y para obtener su libertad tenían que pagar a los explotadores fuertes sumas de dinero que incluían elevados intereses inasumibles, según el relato policial. "Quedan vinculadas a la organización de por vida", apuntó el comisario Río-Miranda.

Por otra parte, la rama que operaba en Bilbao se dedicaba a regularizar la situación de ciudadanos chinos en España, a cambio de cantidades cercanas a los 10.000 euros por persona, según fuentes policiales.

Para ello se valían de empresas pantalla, generaban contratos de trabajo falsos y solicitaban autorizaciones de residencia temporal y trabajo por circunstancias excepcionales para sus clientes.

Ambas ramas actuaban coordinadamente, la Policía Nacional calcula que por esta última operativa obtuvieron un beneficio de unos 5 millones de euros y fueron localizados por la denuncia de un ciudadano chino asentado en España, gracias a los cauces establecidos para denunciar la trata de seres humanos establecidos por el Ministerio del Interior, según informaron los agentes encargados de la operación.