Sin este tubérculo mexicano, la píldora anticonceptiva jamás hubiera existido

Desde mediados del siglo XX, el barbasco que crece en el sur de México se utiliza para la producción de hormonas sintéticas esteroides como la progesterona, elemento principal de los anticonceptivos.

La píldora anticonceptiva es uno de los avances científicos más importantes de la humanidad. Pero pocos saben que un tubérculo originario de tierras mexicanas está detrás de ese gran invento.

Barbasco amarillo (Piscidia piscipula) F Papilonaceae
también Jebe o Borracho, es la mata peces, de propiedad narcotica, arbol autóctono presente en el #parquedeleste, usado para barbasquear, tiene el alcaloide piscundin y sus hojas para sazonar la cochinita pibil mejicana pic.twitter.com/zLrpV5qXnR

— Amigos de Arboles del Parque del Este (@arbolespe) September 22, 2021

Popularmente conocido como barbasco, este vegetal crece en el sureste del país latinoamericano y hay registros de que incluso los mayas utilizaban diferentes partes de él para curar enfermedades o hasta lo procesaban como veneno para incrustarlo en sus flechas.

"Muchos de nosotros los mexicanos no sabemos que la píldora anticonceptiva no sólo se crea en México, sino que es por medio de recursos naturales del sureste de México que hace posible, a niveles comerciales, la síntesis de hormonas esteroides. Y esto es importante porque de ahí sale la cortisona, la píldora anticonceptiva y más de 300 medicamentos, todos ellos derivados del barbasco", explica Gabriela Soto Laveaga, académica de la Universidad de Harvard.

La también colaboradora del Seminario Universitario de Historia, Filosofía y Estudios de las Ciencias y la Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) asegura que, gracias a esta materia prima, la medicina reproductiva y el tratamiento del dolor lograron avances considerables.

Durante muchos años, el barbasco fue recolectado por campesinos mexicanos. Luego, sucedió un proceso de búsqueda e investigación internacional para llegar a los resultados concluyentes que hoy se tienen sobre dicho tubérculo, según se cuenta en el libro Laboratorios en la selva. Campesinos mexicanos, proyectos nacionales y la creación de la píldora anticonceptiva (2021), escrito por Soto Laveaga.

"Los recolectores del barbasco hicieron suyo el lenguaje de la química y de la ciencia, lo que les posibilitó abrirse nuevas vidas en el campo, desafiar nociones locales y nacionales de lo que implicaba ser mexicano a mediados del siglo XX", dice la experta.

Se sabe que uno de los inventores de la píldora anticonceptiva es el austriaco Carl Djerassi, pero atrás también están los nombres de los mexicanos George Rosenkranz y Luis Ernesto Miramontes. Ambos aparecen en la patente original de este fármaco.

El descubrimiento de la píldora sucedió en México el 15 de octubre de 1951, durante una investigación impulsada por el laboratorio mexicano Syntex, según refiere Notimex.