Cataluña defiende aplicar restricciones duras y pide que se extiendan a toda España

BARCELONA (Sputnik) — El presidente de Cataluña, Pere Aragonès, defendió la decisión de su gobierno de aplicar restricciones "duras" para frenar la nueva ola de COVID-19 y pidió que estas se extiendan a otras regiones de España.

"Decidimos adoptar un conjunto de medidas duras, que no deseábamos y que nos duelen, pero que son necesarias, imprescindibles y razonables ante la situación en la que nos encontramos", afirmó en rueda de prensa el líder regional.

Si las autoridades catalanas obtienen el aval judicial, la noche del 23 de diciembre entrará en vigor un toque de queda de 1 a 6 de la mañana, el cierre del ocio nocturno, un máximo de 10 personas en reuniones y la reducción de aforos en interiores.

El confinamiento nocturno se aplicará en municipios de más de 10.000 habitantes con incidencia superior a 250 casos acumulados en una semana.

Aragonès admitió que son medidas "restrictivas" que afectarán la actividad económica y social "en unas fechas muy significativas", coincidiendo con las fiestas de Navidad y fin de año, pero las defendió en un contexto "crítico" de expansión de la variante ómicron.

También anunció que pedirá al resto de regiones españolas que tomen la misma decisión durante la reunión que mantendrán el 22 de diciembre los 17 líderes autonómicos y el presidente de España, Pedro Sánchez.

Sánchez convocó el encuentro para debatir la vuelta de medidas a escala nacional, aunque las autoridades catalanas optaron por adelantarse ante unos indicadores "disparados" con los que no se podía "esperar ni un día", dijo Aragonès.

Según el presidente catalán, "es necesario que más territorios aparte de Cataluña apliquen medidas para contener la pandemia", por lo que exigirá al presidente español "que emplace a los presidentes a actuar en esta dirección".

Cataluña, donde viven 7,5 millones de personas, registró en el último día un récord de contagios diarios desde el comienzo de la pandemia con 11.500 nuevos casos, y cuenta con más de 1.300 personas hospitalizadas por el COVID-19.

"Compartimos la tristeza porque todos habíamos imaginado que tras un año pasado que fue duro, esta Navidad y fin de año podrían ser distintos y parecidos a los de antes de 2020, pero desgraciadamente no estamos en esta situación", lamentó su presidente, que garantizó que con las restricciones se aprobarán ayudas para los sectores afectados.