Pablo Ibar, español condenado a cadena perpetua en EEUU, "animado" por una posible revisión del caso

La familia del español, que lleva preso desde 1994 por un triple asesinato del que se declara inocente, acaba de apelar al tribunal para celebrar un nuevo juicio. El proceso puede demorar un año, pero es la esperanza después de un costoso periplo.

En 1994, Pablo Ibar fue condenado a pena de muerte. La causa, un triple asesinato en Miramar, al sureste de Florida. El recluso hispano-estadounidense, con padre de origen vasco y madre de origen cubano, ha sido juzgado tres veces a lo largo de este tiempo. En la primera ocasión, fue declarado nulo por falta de unanimidad del jurado. En la segunda se le condenó a pena de muerte, pero volvió a anularse por pruebas "escasas y débiles". Y en 2019, su última y tercera vez, se dictaminó la cadena perpetua. Un revés que dejó al reo, quien siempre se ha declarado inocente, con el ánimo muy bajo.

Ahora, sin embargo, Ibar se siente "animado" por la posibilidad de revisar esta sentencia. Según han contado Andrés Krakenberger, presidente de la plataforma Pablo Ibar Juicio Justo, su padre, Cándido, y su esposa, Tanya, la defensa del hispano-estadounidense ha presentado una apelación para pedir un nuevo juicio en el tribunal de apelaciones del distrito número 4 de Florida. La decisión puede tardar un año en resolverse, pues se abre un plazo de alegaciones por parte de la Fiscalía y otro para rebatir estos argumentos, pero es un rayo de esperanza.

La familia de Pablo Ibar confía en el último recurso presentado en Florida, que podría resolverse en el plazo de un año pic.twitter.com/npnIgvaO1R

— Ion Salgado (@Ion_Salgado) November 22, 2021

"Perder el juicio [en 2019] fue un palo tremendo, pero Pablo ha sabido tirar para adelante, ser positivo y reconstruir su moral", ha expuesto su mujer, Tanya, en una rueda de prensa convocada el 22 de noviembre por los miembros de la familia y el presidente de la plataforma. "Ahora está de ánimo razonablemente bien dentro de la tremenda injusticia que ha sufrido", ha añadido.

En el acto, que ha tenido lugar en Vitoria (en el País Vasco), se ha recordado la noche del 26 de junio de 1994 en que encontraron los cuerpos de Casimir Sucharski, Marie Rogers y Sharon Anderson y el periplo judicial hasta la fecha. Pablo Ibar, que tiene actualmente 49 años, estaba "muy decaído" después de la derrota de 2019. Cándido, su padre, ha explicado que en estos momentos se siente "animado y contento dentro de lo que cabe", porque además acaban de operarle de una lesión en el brazo. "Es un chico fuerte y pensar que se cree en él le ayuda", ha asegurado.

#PabloIbar merece un JUICIO JUSTO, un Juicio en el que el Jurado pueda conocer toda la evidencia, en el que el Juez no esté casado con la fiscal contra Pablo en la primera apelación. https://t.co/9898VL272w #PabloIbarJuicioJusto #Libertad pic.twitter.com/TAsTD8klNS

— Asoc Pablo Ibar (@asocpabloibar) November 9, 2021

Su esposa ha refrendado las palabras de Cándido: "Pablo sigue luchando y está animado", ha indicado, deseando que gane la apelación y pueda tenerlo en casa. El abogado y presidente de la asociación, Krakenberger ha defendido, por su parte, los "argumentos demoledores" con los que esperan dar la vuelta al veredicto. Se denuncia, ha indicado, el "juego sucio" y las "irregularidades" de la Fiscalía durante el último juicio.

Tienen "argumentos de peso" para lograr un nuevo juicio, ha sostenido el letrado, aunque para afrontarlo será necesario una nueva recaudación de fondos, ya que el anterior proceso costó más de un millón de dólares (unos 890.000 euros) y presentar la última apelación ya ha costado 250.000 (unos 220.000 euros). El portavoz ha detallado que hay "dos formas de apoyar a Pablo". Uno es escribirle cartas a la cárcel, porque con eso se mantiene ocupado y siente el respaldo, y aportar dinero para su defensa a través de la web de la Asociación contra la Pena de Muerte que lleva su nombre, que está preparando una campaña de recaudación "más potente".