El emotivo reencuentro de los militares españoles con sus familias tras volver de Afganistán | Fotos
Los talibanes (estudiantes), autodenominado Emirato Islámico de Afganistán, es un movimiento fundamentalista islámico con una fuerte ala paramilitar. Se fundó en 1994 por yihadistas que lucharon contra la República Democrática de Afganistán y el contingente soviético que lo apoyaba.
Dominó el país desde 1996 tras ganar la guerra civil. Refugió a Osama bin Laden y fue derrocado durante la invasión de EEUU tras el 11S, pero recuperó el poder con la retirada estadounidense en 2021.
Es considerado un grupo terrorista por el Consejo de Seguridad de la ONU y está prohibido en Rusia, Turquía y Canadá.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, y la plana mayor del Ejército acudieron hasta la base aérea de Zaragoza para recibir a los últimos militares llegados desde el aeropuerto de Kabul. El 27 de agosto despegaron por última vez de Afganistán los dos aviones A400M encargados de la repatriación. A bordo, 81 personas, entre soldados y personal de la Embajada. 53 pasajeros pertenecían a las Fuerzas Armadas.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, y la plana mayor del Ejército acudieron hasta la base aérea de Zaragoza para recibir a los últimos militares llegados desde el aeropuerto de Kabul. El 27 de agosto despegaron por última vez de Afganistán los dos aviones A400M encargados de la repatriación. A bordo, 81 personas, entre soldados y personal de la Embajada. 53 pasajeros pertenecían a las Fuerzas Armadas.
En total, 2.206 personas fueron evacuadas desde Afganistán. Por números, 1.671 personas del contingente español, 333 de la Unión Europea, 131 de Estados Unidos, 50 de la OTAN y 21 de Portugal. A nivel logístico, 17 rotaciones del A400M entre Kabul y Dubái, 10 vuelos operados por Air Europa entre el golfo Pérsico y la base de Torrejón de Ardoz (Madrid) y uno más del A400M para cubrir esta ruta. En cuanto a personal, 130 militares, de los que medio centenar estaban desplegados en el aeródromo afgano. "Vuelven con la satisfacción de la misión cumplida, pero lo hacen con tristeza porque mucha gente se ha quedado fuera y no ha podido entrar", dijo Robles, quien destacó "el orgullo que siente toda la sociedad española" por su Ejército.
En total, 2.206 personas fueron evacuadas desde Afganistán. Por números, 1.671 personas del contingente español, 333 de la Unión Europea, 131 de Estados Unidos, 50 de la OTAN y 21 de Portugal. A nivel logístico, 17 rotaciones del A400M entre Kabul y Dubái, 10 vuelos operados por Air Europa entre el golfo Pérsico y la base de Torrejón de Ardoz (Madrid) y uno más del A400M para cubrir esta ruta. En cuanto a personal, 130 militares, de los que medio centenar estaban desplegados en el aeródromo afgano. "Vuelven con la satisfacción de la misión cumplida, pero lo hacen con tristeza porque mucha gente se ha quedado fuera y no ha podido entrar", dijo Robles, quien destacó "el orgullo que siente toda la sociedad española" por su Ejército.
La ministra de Defensa agradeció personalmente a los militares su "heroica labor". Robles charló con los arribados, mientras era testigo del rencuentro de los operarios y sus familiares. El desembarco de los miembros de las Fuerzas Armadas en Zaragoza puso fin a 11 días de trabajo frenético, pero también de tensión para aquellos que vivían Afganistán a través de los medios de comunicación.
La ministra de Defensa agradeció personalmente a los militares su "heroica labor". Robles charló con los arribados, mientras era testigo del rencuentro de los operarios y sus familiares. El desembarco de los miembros de las Fuerzas Armadas en Zaragoza puso fin a 11 días de trabajo frenético, pero también de tensión para aquellos que vivían Afganistán a través de los medios de comunicación.
Por el hangar del aeródromo militar aragonés correteaban los niños y niñas a la espera de la llegada de sus padres y madres. Con las luces del crepúsculo, los aviones se posaron sobre el firme y abrieron las puertas. Por fin, los operarios se reunían con sus familiares. Los más pequeños se abalanzaron sobre sus brazos.
Por el hangar del aeródromo militar aragonés correteaban los niños y niñas a la espera de la llegada de sus padres y madres. Con las luces del crepúsculo, los aviones se posaron sobre el firme y abrieron las puertas. Por fin, los operarios se reunían con sus familiares. Los más pequeños se abalanzaron sobre sus brazos.
Padres y hijos se fundieron en prolongados abrazos. Las parejas bajaron la mascarilla para besarse. Los pechos se hinchaban de alegría y emoción. La presión se desvaneció levemente tras un final de agosto a miles de kilómetros de distancia de sus hogares.
Padres y hijos se fundieron en prolongados abrazos. Las parejas bajaron la mascarilla para besarse. Los pechos se hinchaban de alegría y emoción. La presión se desvaneció levemente tras un final de agosto a miles de kilómetros de distancia de sus hogares.