Irán duplica el número de centrifugadoras para el enriquecimiento de uranio al 60%

MOSCÚ (Sputnik) — Irán aumentó a dos las cascadas de centrifugadoras en su instalación nuclear subterránea de Natanz para enriquecer uranio al 60% de pureza, comunicó el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).

En abril se comentó que el número de cascadas en Natanz se redujo de dos a uno. Según los datos del OIEA, en aquel entonces en Natanz quedó una sola cascada del tipo IR-6, perteneciente al sistema de centrifugadoras de sexta generación.

"El OIEA determinó que ahora, aparte de esa cascada, Irán también utiliza en su instalación subterránea una cascada del tipo IR-4 para enriquecer uranio al 60%", comunicó Reuters citando un informe del OIEA aún no publicado.

Irán había informado al OIEA sobre sus planes de enriquecer uranio al 60% de pureza, necesario para producir molibdeno, que a su vez se necesita para producir sustancias radiactivas usadas en la radiomedicina.

Las autoridades de Irán explicaron que decidieron aumentar el grado de pureza del uranio e instalar unas centrifugadoras más modernas en respuesta al ataque subversivo perpetrado contra la instalación de Natanz.

Irán impulsó su programa nuclear durante la presidencia de Mahmud Ahmadineyad (2005-2013). Entonces el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) comenzó a realizar inspecciones al país, que al final confirmaron el desarrollo de las armas nucleares por parte de Irán. En respuesta, Estados Unidos, y varios países europeos, impusieron sanciones que afectaron al sector financiero y las exportaciones de recursos energéticos y de armas.

En julio de 2015, durante el mandato del presidente Hasán Rohani, Irán y seis mediadores internacionales –Rusia, EEUU, el Reino Unido, China, Francia y Alemania– firmaron el Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC), que estableció una serie de limitaciones al programa nuclear de Irán con el objetivo de excluir su posible dimensión militar, a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales.

En mayo de 2018, EEUU rompió el acuerdo y empezó a imponer sanciones unilaterales contra Irán con el argumento de que ese país seguía desarrollando armas nucleares. Un año después, Irán, en respuesta, comenzó a reducir de manera gradual sus compromisos en el marco del PAIC.

Desde principios del pasado abril, Viena acoge reuniones de la Comisión Conjunta del PAIC encaminadas a restaurar el pacto, y también fueron creados tres grupos de trabajo que elaboran medidas concretas que han de tomar EEUU e Irán para cumplir con el acuerdo.