Investigan en España si la muerte de un hombre de 36 años tiene relación con la vacuna de Janssen

El joven sufrió un ictus a principios del mes de julio, 10 días después de recibir la vacuna de Janssen contra el COVID-19.

Se trata de un varón de 36 años que fue vacunado con el fármaco de la empresa estadounidense Johnson & Johnson en su centro de trabajo, en un pueblo de la provincia de Sevilla. El hombre no tenía ninguna patología previa diagnosticada.

Los médicos que le atendieron en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla han apuntado que podría haber una relación directa entre la vacuna y su fallecimiento, tal y como ha adelantado el diario El Mundo.

Unos días después de recibir la vacuna el joven empezó a sentirse mal pero pensó que se debía a los efectos secundarios de la vacuna. Sin embargo, el 5 de julio los síntomas se agravaron y fue ingresado en el Hospital Comarcal de la Merced. Las primeras pruebas, según afirma la familia, determinaron que había sufrido un ictus. El joven fue trasladado en helicóptero hasta el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, donde no pudieron hacer nada por salvar su vida y falleció al cabo de unas horas.

Cabe recordar que el Ministerio de Sanidad de España solo contempla el uso de Janssen para mayores de 40 años. Durante las últimas semanas algunas comunidades autónomas han solicitado que se permita administrar el fármaco a menores de 40 años, pero Sanidad se mantiene firme en su decisión. Aún así, sí que se permite la administración de esta vacuna en casos excepcionales como estudiantes que se marchan próximamente al extranjero, marineros que tienen que embarcar, inmigrantes que están de paso o incluso personas sin un hogar fijo a los que es más difícil localizar para una segunda dosis.