Melinda Gates podría quedar fuera de la Fundación Gates si no se lleva bien con Bill

El divorcio entre Melinda y Bill Gates podría no ser tan amigable como se ha hecho ver. Ahora, la Fundación que lleva el nombre de la pareja está en el punto de mira y a pesar de que acordaron que ambos seguirían al frente de ella tras la separación, Melinda podría verse obligada a retirarse en caso de que no pueda trabajar con Bill.

El cuarto hijo de la pareja, como ambos llaman a la organización filantrópica, podría estrenar nuevo copresidente en dos años, ya que Melinda acordó renunciar a su puesto en la fundación si ve que no puede trabajar con su exesposo.

"Desde su anuncio [de divorcio] en mayo, Bill y Melinda han cumplido su palabra y se han mantenido plenamente comprometidos con todos los aspectos del trabajo de la fundación", escribió el director ejecutivo de la fundación, Mark Suzman.

Sin embargo, como paso adicional, acordaron que si después de dos años deciden que no pueden continuar trabajando juntos, Melinda renunciará como copresidenta y fideicomisaria.

En este escenario, Bill le daría a Melinda recursos personales para que su exesposa y madre de sus tres hijos pueda continuar su labor filantrópica.

Por su parte, Melinda señaló que espera continuar al frente de la organización.

"Creo profundamente en la misión de la fundación y sigo totalmente comprometida como copresidenta con su trabajo", señaló en un mensaje.

Suzman sostuvo que este acuerdo también ha estado motivado a la decisión de Warren Buffet de dimitir como fideicomisario. Esto ha llevado a que los ahora exesposos hayan acordado ampliar el número de fideicomisarios, quienes serán revelados en enero de 2022.

Asimismo, Bill y Melinda anunciaron una contribución de 15.000 millones de dólares adicionales a la dotación de la fundación, la mayor cantidad desde los 20.000 millones en acciones de Microsoft que transfirieron en el año 2000. Esto eleva la contribución total a la astronómica cifra de 65.000 millones de dólares.