Bolivia denuncia que Gobierno de expresidente Macri ayudó a golpe de Estado de 2019

LA PAZ (Sputnik) — Bolivia denunció que el Gobierno del expresidente Mauricio Macri (2015-2019) colaboró con material bélico al golpe de Estado de 2019 que derribó a Evo Morales y puso en su lugar a la mandataria transitoria Jeanine Áñez, en lo que describió como una reedición del 'Plan Cóndor' del siglo pasado.

"Consideramos esta situación de extrema gravedad y absolutamente inaceptable, porque ha sido una contribución para que se cometan graves violaciones a derechos humanos y se atente contra la dignidad y la soberanía nacional", dijo en conferencia de prensa el canciller boliviano, Rogelio Mayta.

La autoridad hizo la denuncia presentando una carta del comandante de la Fuerza Aérea Boliviana durante la crisis de 2019, Jorge Terceros, al embajador argentino Normando Álvarez, agradeciéndole por la colaboración militar.

"Me permito comunicarle que se recibió el siguiente material bélico de agentes químicos", describió el general Jorge Gonzalo Terceros Lara en la misiva que remitió el 13 de noviembre de 2019 al embajador argentino Normando Álvarez García y a la que tuvo acceso Sputnik.

La misiva, que lleva por título "expresar agradecimiento", está fechada el 13 de noviembre de 2019, un día antes de que asumiera el Gobierno de facto de Jeanine Áñez (2006-2019).

Las armas que Argentina envió a Bolivia, según se detalle en esa carta, fueron 40.000 cartuchos de balas de goma AT 12/70, 18 gases lacrimógenos en spray MK-9, 5 gases lacrimógenos en spray MK-4, 50 granadas de gas CN, 19 granadas de gas CS y 52 granadas de gas HC.

En el documento, el comandante agradece "la colaboración prestada a esta institución armada en el marco del apoyo internacional entre nuestros países debido a la situación conflictiva que vive Bolivia".

La carta fue recibida por la Embajada argentina en Bolivia el 15 de noviembre de 2019.

Plan Cóndor

El canciller boliviano manifestó indignación al recordar que el Plan Cóndor de colaboración entre dictaduras derechistas de varios países sudamericanos en las décadas de 1970 y 1980 tuvo una suerte de segunda parte durante el golpe de 2019 en Bolivia, por el aparente apoyo de Argentina y Ecuador al derrocamiento de Morales.

"En 2019 los acontecimientos vividos en Bolivia han dado una situación similar, salvando las diferencias históricas, de alineamiento y cooperación de determinados estados para poder primero ayudar a que un proyecto que rompía con el orden constitucional se hiciera con el Gobierno de nuestro país, y segundo para que se pudiera consolidar en el Gobierno en base a la represión, inclusive con uso de armamento letal", dijo Mayta.

En respaldo a su denuncia, leyó una carta que Terceros envió al embajador Álvarez el 13 de noviembre de 2019, al día siguiente de la autoproclamación de Áñez, en la que agradece "por la colaboración prestada a esta institución armada (FAB)".

"El Gobierno de Mauricio Macri de la Argentina en 2019 también aportó con equipamiento, material, precisamente para que se pueda reprimir la protesta social, para poder consolidar el Gobierno que rompía el orden constitucional, de Jeanine Áñez", remarcó, citando además la cooperación paralela de Ecuador a la Policía boliviana.

Apuntó que el 15 de noviembre de 2019, dos días después del agradecimiento del comandante boliviano al embajador argentino, se produjo en Sacaba la primera de dos masacres de civiles, producto de la represión militar y policial a protestas contra Áñez, seguida por un hecho similar el 19 de noviembre en Senkata (El Alto).

"Hoy estamos indignados porque estamos advirtiendo que la conducta de un Gobierno extranjero ha colaborado para concretar graves violaciones a los derechos humanos", añadió.

El excomandante Terceros está en detención preventiva desde el pasado fin de semana, como uno de los procesados por el golpe de 2019 en un juicio ordinario que incluye a la expresidenta Áñez.

Disculpas de Argentina

Por su parte, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, pidió disculpas al Gobierno boliviano tras constatar que desde el país sudamericano salió un cargamento que fue utilizado por las fuerzas de ese país para dar un golpe de Estado en 2019.

"Quiero en primer lugar pedirle disculpas a su Gobierno y a su pueblo en nombre del pueblo argentino", señaló el mandatario en una carta dirigida a su par boliviano, Luis Arce Catacora.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) investiga en estos momentos lo sucedido a través de un grupo interdisciplinario de expertos independientes, informó Fernández.

"Se constató que desde nuestro país se remitió una partida de material que no puede ser interpretada sino como un refuerzo a la capacidad de acción de las fuerzas sediciosas contra la población boliviana en esos días", confirmó el jefe de Estado.

En consecuencia, "se trató de una colaboración decidida por el Gobierno del entones presidente Mauricio Macri con la represión militar y policial que sufrieron quienes defendían el orden institucional en su país", añadió el mandatario.

Alberto Fernández reconoció con "dolor" y "vergüenza" que esta colaboración de armamento se confirmó a través de un documento remitido por autoridades bolivianas el 15 de noviembre de 2019 al entonces embajador Normando Álvarez García.

"Guardo para tranquilidad de mi conciencia haber hecho cuanto estuvo a mi alcance para preservarla vida del [expresidente de Bolivia] Evo Morales (2006-2019), [el exvicepresidente] Álvaro García Linera y muchos otros hermanos bolivianos asesinados por los golpistas", sostuvo Fernández al recordar la acogida que brindó Argentina a las dos autoridades bolivianas.

El presidente de Argentina terminó su carta con un reconocimiento a las democracias de sus respectivos países.

"Tenemos que seguir trabajando juntos para consolidarlas", concluyó.

Tras las elecciones generales de octubre de 2019, ganadas por Evo Morales y denunciadas como fraudulentas por la oposición, las fuerzas militares del país forzaron el 10 de noviembre de 2019 la renuncia y posterior exilio del entonces presidente de Bolivia, del vicepresidente y de altos funcionarios de su Gobierno, lo que dio paso al Gobierno de facto de Jeanine Áñez (2019-2020).