Honduras y la quimera de un Hong Kong tropical

MANAGUA (Sputnik) — El territorio que conforma la República de Honduras celebrará el 15 de septiembre los 200 años de su independencia del colonialismo español y, paradójicamente, lo hará en medio de un proceso de pérdida de soberanía que las élites conservadoras quieren presentar como una especie de Hong Kong en medio del trópico centroamericano.

Se trata de las muy publicitadas Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDEs), un proyecto que analistas políticos consideran retrotrae al país a la época de las tristemente célebres repúblicas bananeras, una forma de explotación económica y dominación neocolonial predominante en la región durante la primera mitad del siglo XX, acuñada precisamente en Honduras por el escritor estadounidense O. Henry (1862-1910).

Lo más triste del caso, coinciden analistas, es que la nueva lesión a la soberanía nacional, cuando ya se creían superados momentos amargos de la historia hondureña como los determinados por las leyes de Concesiones (1917) y de Migración (1929), ocurre cuando el país está cerca de celebrar los dos siglos de la independencia formal de la corona española.

Las ZEDEs están provistas de un alto nivel de autonomía, con sistema político propio, tanto a nivel judicial como a nivel económico y administrativo, en teoría basados en el capitalismo de libre mercado, con la intención de atraer inversión y generar empleo, en zonas deshabitadas o en municipios que soliciten su conversión mediante referéndum.

En Honduras la idea primigenia sobre el proyecto está asociada al Premio Nobel de economía de 2018, el estadounidense Paul Romer, quien asesoró en el tema al presidente Porfirio Lobo (2010-2014) cuando el actual mandatario Juan Orlando Hernández regía en el Congreso Nacional (parlamento unicameral).

Hong Kong

La tesis sustentada por el Estado para promover el fomento de esos enclaves augura una "derrama" (contribución extraordinaria) de empleo sin precedentes, que forjará otra Honduras a las puertas del Bicentenario.

Sin embargo, el rechazo de los más variopintos sectores de la sociedad catracha muestra un juicio muy diferente sobre las ZEDEs, Tal es el caso de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) que desde una perspectiva estrictamente jurídica, las califica como la más grave violación al estado de derecho que se ha registrado en la historia del país.

En términos de geopolítica, en su condición de promotor del proyecto, el Gobierno del Partido Nacional, que antes fracasó en su Programa Honduras 2020 (generación de 600.000 empleos en cinco años), intenta vender la idea de que las "zonas" pueden representar un modelo desarrollista tipo Hong Kong, Macao o Singapur, trasplantado al paralelo 15 Norte a su paso por istmo centroamericano.

"Yo no entiendo por qué el Gobierno insiste en confundir el concepto de Región Administrativa Especial, como Hong Kong y Macao, con las ZEDEs. Los ingleses devolvieron Hong Kong y los portugueses Macao y negociaron que estas dos excolonias tuvieran el mayor grado de autonomía posible porque eso era lo que habían conocido a través del tiempo, pero siempre bajo el control total de China", expuso en entrevista con el diario local La Prensa el economista Carlos Urbizo, uno de los más renombrados expertos del país en esa rama.

El economista, que incluso en alguna ocasión fue aspirante presidencial por el actual partido de Gobierno, narró que en conferencias internacionales conoció a "cuatro extranjeros libertarios que quieren hacer un experimento en Honduras, como intentó Henry Ford en Brasil".

Urbizo se refería a Fordlandia, el fracasado proyecto de explotación cauchera en el Amazonas que hace 90 años le reportó al magnate estadounidense pérdidas por 20 millones de dólares (unos 200 millones al cambio actual).

"Estos tipos andan en otras cosas. Estos quieren convertir estas ZEDEs en pequeños principados. Lo que nos molesta a nosotros es el rompimiento de la soberanía, de la unidad y dignidad de la nación hondureña. El pueblo se opone a las ZEDEs, así como lo hizo con la Stone Container.

En esa ocasión la referencia histórica tiene que ver con el decreto del presidente Rafael Leonardo Callejas (1991-1994) firmado el 21 de septiembre de 1991, mediante el cual Honduras concedía a la trasnacional estadounidense (mayor productor mundial de cartón para empaque) el derecho de explotar más de un millón de hectáreas de bosques en los departamentos de Gracias a Dios (extremo noreste), Yoro (norte) y Olancho (este), entre otros sitios.

El 16 de junio fue constituido el Movimiento Nacional Contra las ZEDEs y por la Soberanía Nacional, que convocó a un plantón nacional de protesta para el día 22, frente a la sede de la Corte Suprema de Justicia.

Universidad

La UNAH anunció el fin de semana que emprenderá acciones judiciales en los tribunales contra la ZEDEs, a las cuales considera una abierta violación de la Constitución de Honduras.

A través de un comunicado, la más importante casa de altos estudios del país argumentó que una campaña publicitaria a favor de esos enclaves de manera equívoca compara su estatus con el de la autonomía universitaria.

"La autonomía universitaria es un estatus internacional, conferido a las universidades públicas, precisamente para liberarlas de cualquier injerencia o intromisión indebida a su quehacer esencial, por parte del poder político. Dicha comparación afecta gravemente el prestigio de la UNAH en tanto es el centro de enseñanza que tiene como principal responsabilidad, desarrollar la educación en el nivel superior por medio de la investigación científica, la vinculación con la sociedad y la promoción de la cultura y las artes", aclara la nota de centro académico.

Además especifica que las también llamadas ciudades modelos violan los artículos 156, 157, 159 y 160 de la Constitución, referidos a la autonomía universitaria, entre ellos la capacidad de otorgar oficialmente los títulos de carácter académico, así como la de incorporar los diplomas concedidos por universidades privadas y extranjeras.

La infracción constitucional concurre cuando la Ley Orgánica de las ZEDEs (Decreto 120-2013) en su artículo 34 establece que "deben establecer sus propias políticas educativas y curriculares en todos los niveles".