El Kremlin muestra cautela tras noticias sobre posible fin de sanciones contra Nord Stream 2

MOSCÚ (Sputnik) — Las publicaciones sobre posible fin de sanciones de EEUU contra Nord Stream 2 son positivas pero anónimas, y por eso no pueden ser percibidas como una señal, afirmó el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov.

"Por ahora se trata de publicaciones anónimas, por eso es poco probable que sea una señal; aunque es bastante positivo el propio hecho de que se hagan estas publicaciones", afirmó Peskov.

Precisó que por ahora es temprano para hablar de planes oficiales.

A su vez, el viceministro de Exteriores ruso Serguéi Riabkov señaló que la suavización de la postura de Estados Unidos frente al proyecto de gasoducto Nord Stream 2 no hará mejorar cualitativamente las relaciones con Rusia.

"Si Estados Unidos suspende algunos de sus pasos destructivos con relación al proyecto Nord Stream 2 lo vamos a tomar positivamente y lo celebraremos, pero con todo lo que está pasando en los últimos años y observando cómo Estados Unidos destruye las relaciones, eso no favorecerá el diálogo ruso-estadounidense", dijo Riabkov ante la prensa.

En su opinión, EEUU "necesita hacer mucho más para contrarrestar sus acciones de los años anteriores y poder notar cambios en nuestras relaciones".

El 18 de mayo el portal de noticias Axios comunicó que el Departamento de Estado, en su lista de sanciones al Nord Stream 2 preparada para el Congreso, eliminará a Nord Stream 2 AG y a su CEO, Matthias Warnig, utilizando los intereses nacionales de EEUU como justificación. Las sanciones podrían ser impuestas contra los buques rusos de tendido de tuberías, pero no contra Nord Stream 2 AG y sus directivos.

El proyecto Nord Stream 2 tiene por objetivo la puesta en marcha de un gasoducto que transportaría hasta 55.000 millones de metros cúbicos de gas natural por año desde Rusia a Alemania, pasando por las aguas territoriales o las zonas económicas exclusivas de Dinamarca, Finlandia, Alemania, Rusia y Suecia.

Se oponen al nuevo gasoducto, cuya construcción está a punto de finalizar, Estados Unidos, que busca vender a Europa el gas natural licuado de sus yacimientos de esquisto, y varios países europeos como Polonia, Letonia y Lituania.

En diciembre de 2019, EEUU impuso sanciones contra el gasoducto, con lo cual obligó a la empresa suiza Allseas suspender los trabajos de colocación de tuberías.

Un año después, el 11 de diciembre de 2020, el barco Fortuna de una empresa rusa retomó la construcción del gasoducto. El 27 de abril se le unió otro buque ruso, el Akademik Cherskiy.

El operador del proyecto Nord Stream 2 AG en marzo aseguró que el gasoducto estaba terminado al 95%, y solo quedaba colocar 121 kilómetros de tuberías.