Vídeo: la bomba de tiempo ecológica que nos deja la pandemia

Síguenos en
Prenda indispensable durante la pandemia del COVID-19, las mascarillas de protección se han convertido en una enorme fuente de basura, contaminando calles, bosques y cuerpos de agua.
"Queremos mantenernos a salvo, pero también queremos mantener a salvo el medioambiente, y no lo estamos haciendo ahora dejándolas tiradas en el suelo", lamenta Sophia Woehl, voluntaria de limpieza de playas en Pacifica, California.
Un total de 129.000 millones de mascarillas y 65.000 millones de guantes se usan en todo el mundo cada mes, indica un estudio publicado en la revista Environmental Science and Technology el año pasado. Una parte significativa de esos desechos plásticos termina en los océanos.
Si bien algunas compañías ya han empezado a reciclar las mascarillas, de momento solo logran hacerlo con un pequeño porcentaje de todo el material descartado en el marco de la pandemia. Por esta razón, es importante generar conciencia en la población.
Biólogos y activistas medioambientales alertan de la necesidad de desechar adecuadamente los equipos de protección individual para evitar que causen daño a animales, los cuales, entre otras cosas, pueden terminar ingiriéndolos.
Imagen referencial de una mascarilla - Sputnik Mundo, 1920, 15.04.2021
España
Varias regiones de España retiran las mascarillas FFP2 con grafeno por posibles riesgos pulmonares
En el caso particular de los cubrebocas, se recomienda cortar las bandas elásticas antes de tirarlos. Así se evita que pequeños animales marinos o incluso pájaros queden atrapados en ellos en el caso de que esos desechos terminen en la naturaleza.
Lo último
0
Para participar en la conversación,
inicie sesión o regístrese.
loader
Chats
Заголовок открываемого материала